El Gobierno birmano acusa a investigadores de la ONU de intentar "perjudicar" al país

RANGÚN, 6 Ago. (Reuters/EP) -

El Gobierno de Birmania ha afirmado que los investigadores de la ONU que el lunes pidieron un embargo de armas y sanciones para las empresas vinculadas al Ejército birmano pretenden "perjudicar" al país asiático, por lo que han abogado por la "cooperación" entre las distintas partes.

"El Gobierno de Birmania rechaza categóricamente el último informe y sus conclusiones", ha afirmado el Ministerio de Exteriores, en un comunicado en el que ha criticado un documento que considera "destinado a perjudicar los integreses de Birmania y de sus población".

En este sentido, ha apelado a la "cooperación" como "base para la resolución de cuestiones internacionales, incluidos temas de Derechos Humanos". "No creemos que las sanciones económicas vayan a resolver los desafíos", ha subrayado el Ministerio.

Los expertos de la ONU reclamaron el martes sanciones económicas contra empresas extranjeras vinculadas con las Fuerzas Armadas birmanas, señaladas como responsables de la persecución de la minoría rohingya. El informe identifica a 59 compañías con acuerdos comerciales con el Ejército y 14 más que han vendido armas o equipos relacionados desde 2016.

Más de 700.000 rohinhgyas abandonaron el estado birmano de Rajine y huyeron a Bangladesh a raíz de la ola represiva lanzada en agosto de 2017 por las fuerzas birmanas. La ONU ha considerado acreditada la "intención genocida" de los militares, señalados como principales responsables de unos abusos que incluirían asesinatos masivos y violaciones grupales.