MADRID, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las fuerzas de seguridad libanesas han implementado medidas de seguridad especiales en torno a las embajadas situadas en el país a petición del Ministerio de Exteriores en respuesta al atentado ejecutado la semana pasada contra la sede de la legación diplomática iraní en Beirut, que se saldó con al menos 23 muertos y 147 heridos.
Fuentes de seguridad citadas por el diario libanés 'The Daily Star' han indicado que la petición fue formulada al Ministerio del Interior, quien respondió inmediatamente. Fuentes militares han asegurado que el Ejército participa en el operativo.
La autoría del ataque contra la Embajada iraní fue reclamada por las Brigadas Abdulá Azzam, una filial de la organización terrorista Al Qaeda con base en Líbano, según informó en Twitter el líder espiritual del grupo, el jeque Sirajeddine Zuraiqat.
Las brigadas han amenazado con más ataques en Líbano hasta que Irán retire sus fuerzas de Siria y sus prisioneros sean puestos en libertad de las cárceles libanesas.
Las autoridades han conseguido identificar a los dos atacantes, un ciudadano libanés y un palestino residente en uno de los campamentos de refugiados del país. El fiscal militar, Saqr Saqr, reveló que los dos terroristas se alojaron en el hotel de lujo Sheraton Four Points la noche anterior al ataque.
Los terroristas suicidas se dirigieron al edificio de la legación diplomática en un vehículo robado, tras lo que uno de ellos salió y se inmoló frente a la puerta principal con el objetivo de abrir el paso al conductor.
Sin embargo, éste colisionó con un camión que transportaba agua embotellada y con un vehículo perteneciente al Ministerio de Agricultura. Tras ello, un agente de policía y una persona no identificada intentaron sacar al conductor del coche, que activó en última instancia los 50 kilogramos de explosivos que portaba el vehículo.