Tailandia reconoce que no puede renovar el sistema de compra de arroz

Actualizado: martes, 11 febrero 2014 10:29

BANGKOK, 11 Feb. (Reuters/EP) -  

   El Gobierno tailandés en funciones, liderado por la primera ministra, Yingluck Shinawatra, ha admitido este martes que no tiene competencias para renovar el sistema de compra de arroz cuando termine su vigencia a finales de febrero, una situación que causará malestar en el sector de los agricultores, molestos porque el Ejecutivo no les ha pagado algunas de las últimas cosechas.

   La primera ministra, que lleva meses sufriendo el desgaste de las manifestaciones en contra de su Gobierno en Bangkok y en otras ciudades del país, afronta ahora una nueva situación comprometida con los agricultores y la población rural, que es la base de su apoyo electoral, por los impagos de las cosechas de arroz.

   Yingluck lidera un gobierno en funciones desde diciembre de 2013, cuando se disolvió el Parlamento y convocó elecciones anticipadas para intentar poner fin a la crisis política que sufre el país por las manifestaciones antigubernamentales. Como consecuencia de esta situación, la capacidad del Gobierno de realizar pagos y pedir préstamos está limitada.

   "Sólo somos un gobierno en funciones que no tiene capacidad para ampliar ninguna política. El sistema de compra de arroz terminará automáticamente el 28 de febrero", ha explicado el jefe de Gabinete de Yingluck, Varathep Rattanakorn, en declaraciones a Reuters.

   El sistema de compra de arroz es una de las políticas emblemáticas impulsadas por el Gobierno de Thaksin Shinawatra, el hermano de la actual primera ministra, que fue derrocado por un golpe de Estado militar en 2006 y que, tras exiliarse, fue condenado en 2008 por cargos de corrupción.

   La promesa de pagar a los agricultores por su arroz un precio superior al de los mercados internacionales contribuyó a la llegada de Yingluck al poder en las elecciones celebradas en 2011 pero el sistema de compras ha sido criticado desde algunos sectores por considerarlo un método corrupto y que genera pérdidas económicas con cargo al erario público.

   En las últimas semanas, los grandes bancos se han negado a dar créditos para financiar este programa, por el temor a que el Gobierno no esté realmente capacitado para realizar este tipo de acciones, y China ha decidido cancelar una importante compra de arroz por la apertura de una investigación por corrupción sobre este sistema.

   Este lunes, más de 1.000 agricultores se manifestaron ante la sede provisional del Gobierno, situada en la sede del Ministerio de Defensa, en el norte de Bangkok, y anunciaron que mantendrán sus movilizaciones hasta que el Gobierno llegue a un acuerdo para pagarles las cosechas.

   El ministro de Finanzas, Kittirat Na Ranong, ha asegurado este martes que los granjeros recibirán sus pagos y ha pedido más tiempo para que el Gobierno logre financiación para comprar las cosechas de arroz. "El Gobierno cree que puede lograr el préstamo para el arroz en cuestión de pocos días", ha declarado el ministro a la prensa, tras una reunión del Ejecutivo. "Necesitamos garantizar ante las instituciones financieras que ese préstamo no imcumple la legislación", ha explicado.