MADRID, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
Al menos un guerrillero kurdo peshmerga y otros siete han resultado heridos en la noche de este jueves en un ataque a manos de milicianos del Estado Islámico en varios atentados bomba en el sur de la ciudad iraquí de Kirkuk, zona donde se han recrudecido los combates.
Según ha publicado el diario BasNews, la estrategia de los milicianos yihadistas "se centró en el uso de terroristas suicidas y coches bomba que se detonaron cerca de las fuerzas peshmerga", aprovechando las adversas condiciones climáticas y la niebla. El fallecido sería el general de brigada Sherko Shwani, ha afirmado la publicación.
El general Sarhad Qadir, jefe de las fuerzas de seguridad de la provincia de Kirkuk, ha confirmado que al menos un coche bomba ha estallado este viernes junto a un hotel del centro de la ciudad.
Poco después, según Qadir, varios hombres armados entraron en el edificio y empezaron a disparar contra los civiles. Sin embargo Qadir ha asegurado que las fuerzas de seguridad de Kirkuk han retomado el control del hotel y han matado a los yihadistas.
"Por razones de seguridad y la protección de los civiles, el toque de queda se ha impuesto en Kirkuk hasta que la situación vuelva a la normalidad", ha anunciado Qadir.
APOYO DE LA POBLACIÓN CIVIL KURDA
El corresponsal en Kirkuk BasNews ha relatado como cientos de residentes kurdos de la ciudad han tomado las armas y se han desplazado al sur para apoyar la lucha de los peshmerga contra el Estado Islámico.
Los combatientes peshmerga han asegurado este viernes que han conseguido retomar el control de varias zonas y pueblos del sur de Kirkuk incluyendo Miryam Bagg, Telward, Maktab Jalid, Mala Abdulá, y Nahran. Además, han dicho que tienen en su posesión un número indefinido de cadáveres de miembros del Estado Islámico.
"Querían tomar Kirkuk pero afortunadamente las fuerzas peshmerga han sido capaces de empujarles más al sur. La lucha continúa", ha explicado el comandante de Husein Yazdanpaná.