Rechaza que posible envío de aviones galos a Polonia y países bálticos supongan una escalada militar
BRUSELAS, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente francés, François Hollande, ha dejado claro que mantiene la invitación al presidente ruso, Vladimir Putin, para la conmemoración del 70 aniversario del Desembarco de las tropas aliadas en Normandía en la Segunda Guerra Mundial.
"He invitado al presidente Putin para las celebraciones del desembarco el 6 de junio y mantengo esta invitación porque aquí estamos en una conmemoración y compartimos los miles, por no decir, millones de muertos que han sido víctimas de este conflicto", ha justificado Hollande en rueda de prensa al término de la cumbre de dos días con sus homólogos europeos a pesar del acuerdo para cancelar la cumbre bilateral entre la UE y Rusia y las cumbre bilaterales de los Estados miembros.
Hollande ha admitido la necesidad de buscar "una bajada" de la tensión por Ucrania con Rusia y ha insistido en que la conmemoración del 70 aniversario del desembarco de Normandía debe preservar "el espíritu de la paz" y en que Rusia "ha hecho prueba de solidaridad con Francia y ha pagado un precio pesado para luchar contra el nazismo".
El presidente galo ha defendido las sanciones adoptadas como la ampliación de los individuos sancionados porque tendrá un impacto "para su circulación y para su patrimonio", así como la "suspensión de las relaciones, incluido de cooperación" y el acuerdo para "preparar medidas dirigidas en caso de una subida de la tensión y la escalada".
"Hay necesidad de terminar con esta subida de la tensión, que recuerda efectivamente a momentos particularmente duros de nuestra historia reciente", evocando la Guerra Fría. "No puede durar sin consecuencias, notablemente económicas", ha recalcado Hollande.
DEFIENDE ENVIAR AVIONES DE COMBATE A POLONIA Y BÁLTICOS POR SOLIDARIDAD
Preguntado por el posible envío de aviones de combate de Francia a Polonia y los países bálticos anunciado por el ministro de Defensa, Yves Le Drian, y si esto supone una escalada militar de facto, Hollande ha rechazado tajantemente esta percepción.
"Claramente no por nuestra parte. Se trata de asegurar a nuestros amigos y aliados", ha explicado Hollande, que ha insistido en que se trata de "una prueba de cooperación y de solidaridad" para "velar por que operaciones de seguridad puedan llevarse a cabo". "No hay otro mensaje más que este", ha zanjado, sin pronunciarse sobre los portaaviones Mistral que Francia ha acordado vender a Rusia.
