NUEVA DELHI, 3 Mar. (EP/AP) -
Surender Koli, un trabajador del hogar indio, confesó hoy haber violado y asesinado a al menos 19 menores y mujeres para luego acumular sus restos desmembrados en una alcantarilla situada en las inmediaciones de la casa en la que estaba empleado, informaron fuentes oficiales.
La serie de asesinatos, cometidos en el barrio de Noida, en Nueva Delhi, provocaron la indignación de los familiares de las víctimas, quienes acusan a la Policía de ignorar sus denuncias de desaparición de 38 personas en los últimos dos años. Casi todas las víctimas pertenecían a familias pobres que prestaban sus servicios en las viviendas de la zona.
El sospechoso trabajaba como sirviente en una vivienda de Noida cuando fue detenido junto con el dueño de la casa el pasado mes de diciembre, poco después de que la policía encontrara los restos de sus víctimas en una alcantarilla.
Koli confesó su culpabilidad durante una vista a puerta cerrada celebrada el pasado jueves, según informó ayer un portavoz de la Oficina Central de Investigaciones india, R.K. Gaur.
Otra fuente oficial anónima informó de que Koli confesó haber abusado sexualmente de sus víctimas antes de matarlas, así como haber realizado actos sexuales con algunos de los cuerpos ya muertos. Koli confesó ser el asesino de las 19 personas cuyos restos han sido hallados, pero no proporcionó ninguna información sobre las otras 19 personas desaparecidas. El presunto asesino no mencionó a su patrón, Moninder Singh Pandher, en su confesión.
Ayer un tribunal ordenó la retención de Pandher durante otros catorce días, informó la agencia Press Trust of India.
Koli ya confesó a la Policía que había asesinado a diez menores y a cinco mujeres, pero esta declaración no tenía valor ante un tribunal. La nueva confesión, sin embargo, sí se ha producido bajo juramento, por lo que podrá ser presentado ante el tribunal.
