BAGDAD 12 Dic. (EP/AP) -
El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, condenó hoy el atentado perpetrado esta mañana en Bagdad y que ha costado la vida a, al menos, 57 personas y herido a 151.
"Condenamos este horrible crimen. Las fuerzas de seguridad perseguirán a quiene lo han perpetrado y los presentarán ante la Justicia para procesarles", aseguró al Maliki, miembro del grupo chií que encabeza el Gobierno, en un discurso pronunciado en el Parlamento. A las 7 de la mañana de hoy --hora local-- explotaron dos bombas en la Plaza de Tayaran dirigidas en principio a una delegación de la policía iraquí que se encontraba en la misma. La plaza está flanqueada asimismo por varios edificios ministeriales y un puente que conduce a la Zona Verde, donde se encuentran el Parlamento iraquí y las Embajadas británica y estadounidense.
Sin embargo, como es habitual en Tayaran, numerosos desempleados estaban reunidos también en la plaza a la espera de que se les designara trabajo y fueran conducidos en furgonetas a las faenas. Estos constituyen un importante número de las 57 víctimas, siete de ellas policías.
El portavoz del parlamento, Mahmud al Mashhadani, suní, deploró que los ataques iban dirigidos a iraquíes sin recursos que se encontraban en la plaza con el objeto de conseguir dinero. "La maldición de dios caiga sobre aquellos que han perpetrado el atentado", declaró al Mashhadani. Se cree que los autores son saddamistas y tafkiris --radicales suníes--.