BAGDAD 28 Ene. (EP/AP) -
La intervención intencionada de políticos y altos cargos oficiales en el proceso judicial que se celebra contra el ex dictador iraquí, Sadam Hussein y otros siete acusados, está amenazando la independencia del tribunal, según explicó hoy la organización de Derechos Humanos Human Right Watch.
El juicio contra Sadam por las matanzas de más de 140 musulmanes chiíes al norte de Bagdad en 1982 debería terminar mañana, tras haber permanecido el proceso paralizado un mes.
El juicio fue paralizado el pasado mes, tras conocerse la sustitución e los dos principales jueves. Además se argumentó que muchos testigos no habían regresado ya a Irak por encontrarse realizando el peregrinaje a La Meca.
El director de Justicia Internacional de HRW, Richard Dicker, aseguró que la sustitución de los jueces era "nada menos que un ataque a la independencia judicial". Según este, la resignación de uno de los jueces y la transferencia de otro supone que los dos nuevos magistrado no hayan escuchado los testimonios, lo que "daña la integridad judicial".