El CAIRO 12 Ene. (EP/AP) -
El líder del movimiento de los Hermanos Musulmanes en Jordania, Salem al Falahat, se pronunció hoy en contra de la nueva estrategia de la Administración estadounidense en Irak, tras subrayar que el presidente norteamericano, George W. Bush, "se está ahogando e intentando escapar de la trampa iraquí, aunque se está sumergiendo en sus profundidades".
Asimismo, denunció que el plan estadounidense "se dirige a sumergir a la región en una mayor destrucción y masacre y abandonar a Irak en medio del odio sectario por muchas décadas más".
Por su parte, el portavoz del Ministerio iraní de Asuntos Exteriores, Mohammad Ali Hosseini, se mostró convencido de que un aumento de efectivos militares de Washington en Irak "extenderá la inseguridad, el peligro y la tensión en el país". Dicho aumento, subrayó, "no ayudará a resolver los problemas en Irak", agregó.
Gran parte del mundo árabe y musulmán denunció la invasión estadounidense en Irak impulsada en marzo de 2003 y, en este sentido, muchos árabes critican que la caída del régimen del ex presidente iraquí Sadam Husein sólo haya traído el caos al país, inmerso en una oleada de violencia interconfesional entre musulmanes suníes y chiíes, que cobró nuevas dimensiones desde el atentado a la mezquita Dorada chií de Samarra en febrero de 2005.
En este contexto de violencia interconfesional, el analista militar del Centro de Investigación con sede en Dubai, Mustafá al Ania explicó que el contingente militar estadounidense "debe emplear necesariamente la misma potencia contra el Ejército del Mahdi (vinculado al clérigo radical chií Muqtada al Sadr), como la que emplean contra Al Qaeda", con el objetivo de desmantelar las milicias de una y otra confesión en Irak.