BAGDAD 12 Dic. (EP/AP) -
Al menos 22 iraquíes fueron secuestrados hoy en tres incidentes separados en Irak, en una jornada más en la que la violencia interconfesional entre chiíes y suníes no da visos de minar y que, por el contrario, se intensificó después de la destrucción de la mezquita chií de Samarra el pasado febrero de 2005.
Un grupo de presuntos insurgentes suníes secuestraron hoy a nueve ciudadanos chiíes que viajaban un autobús con dirección al sur de la capital, de mayoría chií.
El autobús partidó de Bagdad de camino a Kut, a 160 kilómetros al sureste de Bagdad, cuando le fue dado el alta a las 18:30 horas local en un puesto de control improvisado por los presuntos insurgentes. Los secuestradores comprobaron la identidad de los pasajeros y, acto seguido, se escaparon con los rehenes en el vehículo, según informó el agente de Policía de Madain --aldea próxima al secuestro--, Hadi Hassan.
En este sentido, aclaró que el conductor y tres o cuatro pasajeros, de confesión suní, fueron liberados aunque se incautaron del autobús en el que viajaban.
En otro punto del país, en Balad, 80 kilómetros al norte de la capital, hombres armados secuestraron a otros ocho campesinos de confesión suní mientras vendían sus cultivos en un mercado de la ciudad, según informó el grupo suní Asociados Musulmanes Escolares.
Estos episodios se conocen después de que varios hombres armados irrumpieran en una escuela primaria en el barrio de Dujail y secuestraran a cinco profesores chiíes, incluidos tres familiares de un comandante del Ejército, según fuentes policiales iraquíes.