Irak.- El Pentágono se propone reactivar viejas fábricas iraquíes para crear empleo y reducir la violencia

Actualizado: jueves, 4 enero 2007 11:44

WASHINGTON, 4 Ene. (EP/AP) -

El Departamento de Defensa estadounidense cree que la creación de empleo en Irak es clave para impulsar la economía, estabilizar el país y reducir la escalada de violencia, después de que el comienzo de la guerra provocara la destrucción de muchos puestos de trabajo en el país, según informaron responsables del Pentágono.

Siguiendo con esta nueva estrategia, el cuerpo militar norteamericano estudia la viabilidad de reabrir numerosas fábricas que permanecen cerradas desde que comenzara la invasión. De hecho, el Pentágono ordenó hace seis meses la creación de un grupo de expertos para la detección de fábricas potencialmente reutilizables. Este grupo registró cerca de 200 fábricas a lo largo del país, principalmente productoras de textiles, equipamiento industrial y otros bienes.

De este modo, una factoría ya fue reactivada hace dos semanas y se espera que otras nueve corran la misma suerte para finales de mes. Un militar del Pentágono dio esta información en condición de anonimato, ya que no ha sido hecha pública aún oficialmente, y añadió que estas iniciativas podrían dar trabajo a unos 11.000 iraquíes.

Se estima que la tasa de desempleo en Irak se sitúa entre el 20 y el 60% de la población, la inflación está por encima del 50% y más de 1,5 millones de iraquíes han abandonado ya el país como consecuencia de la guerra, según un reciente informe de la ONU. Estas informaciones llegan una semana antes de las declaraciones que se espera emita Bush sobre la nueva estrategia en Irak, en la que se prevé que anuncie el envío de más tropas al contigente estadounidense.

El subsecretario adjunto de Defensa, Paul Brinkley, declaró en una reciente entrevista que la creación de empleo ayudaría a reducir la intensificación de la violencia ya que contentaría la aspiraciones de normalización política y social que también subyacen en los atentados que se perpetran en Irak.

Brinkley también señaló que el propio Ejército norteamericano puede comprar muchos de los elementos que elaboren las fábricas iraquíes que se esperan abrir, tales como cemento o mobiliario. "Compramos gran cantidad de productos y en muchas ocasiones los importamos", dijo.