Irak.- La Presidencia del Kurdistán critica el intento de arresto del exministro de Finanzas Safie al Esawi

Europa Press Internacional
Actualizado: miércoles, 13 marzo 2013 8:34

MADRID 13 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Presidencia de la región semiautónoma del Kurdistán iraquí ha criticado este martes el último intento por parte de las autoridades de arrestar al exministro de Finanzas Safie al Esawi y ha subrayado que estas prácticas solo generarán más tensión y deteriorarán el clima político del país.

En este sentido, ha descrito el intento de detención como "provocativo" y ha recalcado que "dar al Ejército funciones políticas es contrario a la Constitución y solo incita el conflicto político y la controversia entre las partes".

Por ello, ha subrayado que "continuar con estas políticas solo exacerbará las tensiones y creará graves repercusiones y consecuencias", según ha informado la agencia iraquí de noticias NINA.

Estas declaraciones de la Presidencia del Kurdistán son la reacción al comunicado publicado durante la jornada por el propio Al Esawi, en las que aseguró haber sido objeto de un intento de arresto el lunes cerca de la localidad de Rutba, en la provincia de Anbar (oeste), cuando acudía a un funeral.

En su texto, el exministro de Finanzas afirmó que "las fuerzas de seguridad que intentaron el arresto estuvieron respaldadas por vía aérea", antes de agregar que "se retiraron debido al rechazo que provocó la operación entre los miembros de las tribus presentes en la zona, que abortaron el intento".

Al Esawi anunció el 1 de marzo su renuncia al cargo ante un grupo de manifestantes suníes concentrados en la ciudad de Ramadi, en la provincia de Anbar. "Me encuentro aquí hoy para anunciar, delante de vosotros, mi dimisión del Gobierno", dijo, después de más de dos meses de marchas antigubernamentales en esta provincia fronteriza con Siria.

El exministro de Finanzas fue objeto de un atentado con bomba en enero, del que salió ileso, y que provocó un aumento de las tensiones entre la comunidad suní, a la que pertenece, y el primer ministro, Nuri al Maliki, chií.

El atentado se produjo en medio de manifestaciones masivas contra el Gobierno de Al Maliki, al que la comunidad suní acusa de llevar a cabo una política de discriminación contra ellos. En respuesta, el Gobierno iraquí liberó a más de 300 prisioneros detenidos en virtud de las leyes antiterroristas como gesto de buena voluntad hacia los suníes.

Las tensiones entre ambas comunidades se incrementaron el 20 de diciembre después de que El Essawi denunciara el secuestro de alrededor de 150 personas durante una serie de redadas ejecutadas por "una milicia" en su vivienda, su oficina y la sede del ministerio en Bagdad.

ORDEN DE ARRESTO CONTRA AL HASHEMI

Esta denuncia se sumó al malestar existente entre ambas comunidades desde la decisión de un tribunal iraquí de decretar pena de muerte contra el exvicepresidente Tareq al Hashemi --en el cargo en el momento de la condena-- por su responsabilidad en los asesinatos de una abogada y un militar, que habrían sido ejecutados por una supuesta red de escuadrones de la muerte.

Sobre Al Hashemi pesa una 'alerta roja' de arresto de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) a petición del Gobierno de Irak, aunque el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, aseguró que no detendría ni entregaría al exvicepresidente iraquí.

Al Hashemi, un destacado dirigente suní, huyó de Bagdad en diciembre de 2011 después de que el Gobierno dictara una orden de arresto contra él por la supuesta organización de escuadrones de la muerte. El acusado ha negado todos los cargos y ha denunciado que el caso tiene motivos políticos.

En la actualidad se encuentra en Estambul, desde donde se ha negado a asistir al juicio que se sigue actualmente contra él en Bagdad, con el argumento de que Al Maliki controla el tribunal.

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