BAGDAD 19 Mar. (EP/AP) -
La violencia sectaria en Irak empeora, pero la guerra civil no es ni inminente, ni inevitable, señaló hoy el ministro británico de Defensa, John Reid. "La necesidad más urgente en estos momentos es la rápida formación de un Gobierno de unidad nacional", valoró en declaraciones a la prensa en una zona fortificada del centro de Bagdad.
Reid, que mañana pone fin a una visita de tres días a la capital iraquí y a las tropas británicas desplegadas en el sur del país, reiteró además que sus soldados podrían comenzar a entregar el control de algunas áreas a las fuerzas iraquíes a lo largo de este año, dependiendo de cómo avancen de rápido en su entrenamiento. Aunque no dio una fecha precisa, aseguró que no pasará de este año.
Respecto a la reciente ola de violencia sectaria entre chiíes y suníes, reconoció que se trata de "un problema", pero no de tal gravedad como para sostener que "la guerra civil es inminente o inevitable".
Reid, que se ha reunido con líderes políticos locales, apuntó que el nuevo Gobierno debe ser "competente", "aconfesional" e "incluyente", y que debe formarse pronto. "Espero y creo que aprecian la urgencia de esto", apostilló.