Irak.- Los suníes ponen fin a su boicot al Parlamento iraquí tras a una llamamiento a la calma de Al Sadr

BAGDAD 11 Jul. (EP/AP) -

El mayor bloque suní en el Parlamento iraquí informó hoy de que levantará un boicot legislativo, después de una llamada a la unidad por parte de un clérigo chií y la promesa de que será liberada una diputada secuestrada. Mientras, diferentes episodios de violencia dejaron al menos 46 muertos a lo largo de todo el país.

El Frente para el Acuerdo Iraquí suspendió su participación en las sesiones parlamentarias a principios de este mes, después de que uno de sus miembros, la parlamentaria Tayseer al Mashadani, fuera tomada como rehén en un barrio chií de Bagdad. Muchos suníes culparon a la milicia Ejército del Mahdi del clérigo Muqtada al Sadr por el secuestro, aunque la organización lo ha negado.

Al Sadr ha convocado a la unidad y un importante político suní afirmó que el bloque había respondido, en lo que representa el primer indicio de acuerdo entre ambas partes, en medio de un agravamiento de las tensiones sectarias.

"Hemos decidido asistir a las reuniones a partir de mañana, en respuesta a la convocatoria de Muqtada al Sadr", declaró Adnan al Dulaimi a The Associated Press. Dos guardias de Al Mashhadani fueron liberados la semana pasada.

Nuredin al Hyali, otro miembro del bloque, que cuenta con 44 escaños en el Parlamento de 275 miembros, afirmó que se habían producido contactos con los secuestradores. "Hemos recibido promesas ... de que Tayseer al Mashhadani será liberada en los próximos días", dijo. Agregó que los secuestradores han explicado que la diputada "es nuestra invitada" y que le están tratando bien.

Hace algunos días, el político suní Ayad al Samaraie apuntó que un grupo que se atribuyó el secuestro de Al Mashhadani exigió la liberación de 25 chiíes detenidos por soldados estadounidenses a cambio de la cautiva.

El asesor de Al Sadr, Awas al Jafaji, negó que el Ejército del Mahdi haya lanzado una campaña de represalias contra los suníes y acusó a Estados Unidos de alentar las tensiones entre diferentes grupos étnicos y religiosos. En declaraciones a periodistas en Nayaf, Al Jafaji anotó que "lo que ocurre en Irak es un complot de Estados Unidos para atacar a elementos patrióticos. Eso se observa a través de los intentos por crear una brecha entre el Ejército del Mahdi y los suníes".