MADRID, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
El grupo opositor iraní Organización de Muyahidines del Pueblo de Irán (PMOI) pidió este lunes a "todos los iraníes, especialmente a la valiente juventud", que se "subleven" en una "revuelta" el próximo jueves, cuando se cumplen 31 años del triunfo de la Revolución Islámica de 1979.
En un comunicado publicado en su página web, el PMOI anima a los iraníes a corear en las calles "Muerte al principio del Velayat-e Faqih" (gobierno islámico) y "Muerte al dictador, muerte a Jamenei", en referencia a Alí Jamenei, el líder supremo del régimen iraní.
El PMOI "rinde homenaje a los mártires de la revolución antimonárquica del pueblo iraní" y "aclama a todos los muyahidines, combatientes y amantes de la libertad que han caído por la causa de la libertad en su lucha para derrocar al régimen absoluto del líder religioso supremo desde el 20 de junio de 1981 hasta el levantamiento de (el día de) la Ashura el 27 de diciembre de 2009", señala la nota.
El grupo opositor, considerado terrorista por Teherán, acusó a Jamenei, a "su aparato de represión y masacre" y a "todo el régimen de los mulás" de "recurrir a las ejecuciones con la intención de aterrorizar a la gente". También "continúan las detenciones generalizadas y los juicios en los que los detenidos son acusados de 'moharebeh'" (hacer la guerra contra Dios), añadió.
Las autoridades judiciales iraníes anunciaron el martes de la semana pasada que en breve serán ejecutadas otras nueve personas relacionadas con los disturbios que vivió el país después de las elecciones presidenciales del pasado mes de junio. El jueves de la semana anterior fueron ahorcadas dos personas que, junto a las otras nueve, habían sido condenadas a muerte por hacer la guerra contra Dios y pertenecer a una banda armada.
Mientras, la semana pasada se reanudó un juicio contra 16 partidarios de la oposición arrestados tras los enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad el día de la Ashura, cuando murieron al menos ocho personas a causa de los disturbios. Cinco de estas personas están acusadas de 'moharebeh', un delito que conlleva la pena de muerte. El resto están acusados de alterar el orden público y de delitos contra la seguridad nacional.
La semana pasada, la agencia de noticias semioficial Fars cifró en más de 450 los manifestantes detenidos por participar en los disturbios de la Ashura.
El jefe de Policía iraní, Esmail Ahmadi Moghaddam, advirtió este sábado de que no permitirá nuevas protestas antigubernamentales. "Ahora que las diferentes dimensiones de la rebelión están claras, no mostraremos más tolerancia", subrayó Moghaddam, que agregó que "la Policía actuará con firmeza para defender la seguridad de la sociedad y los que infrinjan la ley serán tratados con severidad".
Pero el PMOI aseguró que "la solidaridad con la liberación" de los ciudadanos de "la dictadura religiosa" que rige en Irán "cada vez es más fuerte". "Una nación determinada y en alerta se levanta sin cesar para hacer la guerra contra este régimen antiislámico y antihumano", recalcó.
