Archivo - El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz (archivo) - Hannes P Albert/dpa - Archivo
MADRID, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, ha ordenado este martes la imposición de "sanciones civiles" a los residentes de las dos localidades cisjordanas de las que eran originarios los palestinos responsables del ataque ejecutado el lunes contra un autobús en una de las entradas a Jerusalén, que se saldó con seis muertos, entre ellos un español.
Katz ha indicado en su cuenta en la red social X que estas "sanciones" afectarán a "familiares y residentes de las localidades de los terroristas que llevaron a cabo el mortal ataque en Jerusalén", incluida la revocación de 750 permisos de trabajo y de entrada y la destrucción de "cualquier estructura ilegal" edificada en Qatana y Qubeiba.
Asimismo, ha resaltado que esta decisión llega "en línea con las recomendaciones del aparato de seguridad y del Coordinador de Actividades Gubernamentales en los Territorios, Rasan Alian", sin explicar cómo serán llevadas a cabo, en lo que podría suponer un castigo colectivo contra personas no implicadas en el suceso por el hecho de ser residentes en las mismas localidades que los atacantes.
Las autoridades israelíes suelen aplicar prohibiciones de trabajo en Israel a familiares directos de palestinos acusados de participar en ataques terroristas, si bien estas medidas punitivas no suelen afectar a familiares lejanos, en lo que Tel Aviv argumenta que sirve como una medida de disuasión contra la repetición de ataques.
Por su parte, el Ejército de Israel ha iniciado este mismo martes las labores de medición de las viviendas en las citadas localidades de los dos palestinos implicados en el ataque --identificados como Mohamad Taha y Muzana Amro-- de cara a su futura demolición.
El ataque fue llevado a cabo por dos palestinos que abordaron un autobús en el cruce de Ramot, tras lo que abrieron fuego contra los pasajeros antes de ser "neutralizados" por un miembro de las fuerzas de seguridad y un civil armado "presente en la zona", según ha confirmado la Policía israelí.