JERUSALÉN 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
El fiscal general israelí, Menachem Mazuz, ha solicitado presentar cargos formales por mantener contacto con agentes enemigos, visitar un país enemigo y colaboración para que otros viajen a un país enemigo contra el diputado druso-israelí Said Nafa, del partido árabe-israelí Balad, según recoge el diario 'The Jerusalem Post'. Nafa habría incurrido en estos delitos tipificados durante su viaje a Siria al frente de una delegación drusa en 2007.
Según el pliego de cargos, Nafa remitió al Ministerio del Interior solicitud la solicitud pertinente para que se autorizara su viaje a un país con el que Israel no tiene tratado de paz, tal como Siria. Tras la negativa del Ministerio, entonces dirigido por Meir Sheetrit (Kadima), el grupo anunció que viajaría a Siria de todas formas.
Nafa y otros 282 drusos viajaron en autobuses de Israel a Jordania, según el pliego, donde permanecieron varios días para negociar con la Embajada siria. Finalmente, Nafa logró el permiso para entrar en Siria con la ayuda del ex diputado Azmi Bishara, cristiano-árabe-israelí.
La delegación estuvo en Siria una semana para vistar lugares santos de la religión drusa. Sin embargo, se entrevistó con el vicepresidente sirio, Faruk a Shara, y con al menos un integrante del Gobierno sirio. También habría mantenido un encuentro con el 'número dos' del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), Talal Naji, y habría visitado la sede de la dirección de Hamás, aunque el máximo dirigente de este grupo, Haled Meshal, no se encontraba allí en ese momento. Según la acusación, Nafa "se puso en contacto con conocimiento con un agente extranjero sin una explicación razonable para ello".
Precisamente Bishara renunció a su acta de diputado en 2007 y salió de Israel cuando fue acusado por viajar a Siria y Líbano, donde se entrevistó con dirigentes palestinos. Ya en 2008, la Knesset (Parlamento) aprobó una enmienda de las leyes que habilita la prohibición de servir en la cámara a personas que viajen a estados enemigos.