ROMA 25 Abr. (de la corresponsal de EUROPA PRESS C. Giles) -
El presidente de la República italiana, Carlo Azeglio Ciampi, realizó un llamamiento al diálogo entre las partes políticas y a superar el clima de enfrentamiento electoral en el que se encuentra el país en su mensaje en ocasión de la fiesta nacional de hoy, que celebra la liberación del país del fascismo y el nacismo.
"En un día como este, en el que se celebra la unidad y libertad de la patria, siento el deber de realizar a todas las fuerzas políticas una fuerte invitación a dejar atrás los enfrentamientos de estas elecciones, a recrear el diálogo que es una premisa del buen gobierno y de las instituciones públicas", afirmó Ciampi.
El jefe del Estado quiso recalcar que "el diálogo entre las partes políticas es la esencia de la vida de una democracia serena y la esencia de las instituciones parlamentarias, lugar de encuentro de culturas políticas respetuosas unas con las otras".
El llamamiento de Ciampi llega días después de las elecciones en el país que han dado la victoria de la coalición del centro izquierda, liderada por Romano Prodi, por sólo unos 24.000 votos y que el centro derecha y sobre todo su líder, el presidente del Gobierno saliente, Silvio Berlusconi, se niega a reconocer y aún no presentó su dimisión y continúa repitiendo que se necesitan nuevos controles sobre los votos.
Asimismo, Ciampi comentó que la fiesta de la Liberación de hoy --que recuerda el 25 de abril de 1945 cuando los partisanos retomaron el control del país tras la invasión alemana--, "es también la fiesta de la Constitución republicana nacida de la resistencia". "La Constitución ha sido y seguirá siendo mi Biblia civil, el texto sobre el que he reflexionado en cada momento civil", explicó.
"En la Carta fundamental, un jefe de Estado encuentra la inspiración para actuar y en el dictado de la Constitución, un presidente de la República, elegido como supremo garante de las instituciones y de las libertades encuentra las palabras iluminadoras, los principios, los valores, las reglas que indican con claridad cuáles tienen que ser sus decisiones", añadió Ciampi.
Algunos han visto en este discurso de Ciampi, que terminará su mandato el próximo 13 de mayo, una defensa a ultranza de la Constitución y que rechazaría así las reformas que han sido realizadas durante la legislatura de Berlusconi para introducir un sistema federalista en el país con la concesión de cierta autonomía a las regiones y la creación de un Senado federal y que tendrán que ser aprobadas con un referéndum en junio.