ROMA, 9 May. (de la corresponsal de EUROPA PRESS C. Giles) -
El Parlamento, reunido hoy en sesión plenaria, tampoco elegirá en la segunda votación al nuevo presidente de la República que sustituya a Carlo Azeglio Ciampi, ya que la mayoría partidaria de Romano Prodi y la oposición de Silvio Berlusconi no llegaron a un acuerdo sobre un candidato común.
Al igual que en la primera votación de ayer, el centro derecha anunció que no votará el candidato de la coalición del centro izquierda, Giorgio Napolitano --ayer votó al miembro de Forza Italia, Gianni Letta--, mientras que Prodi explicó que se volverá a votar en blanco ya que no existen las condiciones para votar a su candidato.
"Tenemos confianza. Continuaremos con las entrevistas y las reuniones", comentó Prodi tras la reunión con los líderes de su coalición La Unión y anunciando que también esta mañana se votará en blanco, "lo que significa un apoyo fuerte a Napolitano y en espera de llegar a un pacto lo antes posible".
Según el nuevo secretario de Refundación Comunista, Franco Giordano, que sustituyó al nuevo presidente del Congreso, Fausto Bertinotti, "en el tercer escrutinio de la tarde se podría votar a Napolitano si existen las condiciones".
Según el ex ministro de la Liga Norte, Roberto Calderoli, por el momento la coalición de centro derecha La Casa de la Libertad no votará a Napoliano pero esta vez no apoyará a Letta y mantendrá el voto en blanco.
Sin embargo, los socios de Berlusconi de la UDC anunciaron que están dispuestos a votar ya desde hoy a Napolitano, pero comentaron que "también es importante el valor de la unidad en la coalición".
El presidente de la República es elegido en el Parlamento, reunido en sesión conjunta con 58 representantes de las regiones. Por ello, los electores son 1.010: 615 diputados, 322 senadores (315 más los 7 senadores vitalicios) y los 58 delegados regionales. Cada parlamentario es llamado por nombre y vota en secreto, depositando su papeleta en una urna. Después, el presidente de la Cámara de los Diputados lee en voz alta cada uno de los votos y se procede al recuento.
En las primeras tres votaciones secretas es necesaria la aprobación de los dos tercios de la Asamblea, es decir 673 votos, de los que la Unión posee 540. Si las dos coaliciones no se ponen hoy de acuerdo, en la cuarta votación se necesitará sólo la mayoría absoluta y la coalición mayoritaria ya no tendrá que contar con el apoyo del grupo de Berlusconi para elegir al presidente de la República.
