Italia pone bajo "detención administrativa" el 'Ocean Viking' por diversas "irregularidades"

MADRID, 23 (EUROPA PRESS)

La Guardia Costera de Italia ha anunciado este miércoles la "detención administrativa" del 'Ocean Viking' por una serie de "irregularidades" detectadas en el barco durante una inspección en materia de seguridad, protección del medio ambiente y de las personas a bordo del mismo.

El barco se encuentra amarrado en Porto Empedocle, donde cumple cuarentena tras rescatar a 180 migrantes y refugiados en la zona central del Mediterráneo, y, según la Guardia Costera italiana, presenta "irregularidades de carácter técnico y operativo".

Así, ha manifestado que las mismas "comprometen no sólo la seguridad de la unidad y el equipaje, sino también de las personas que han estado y que podrían recuperarse a bordo", además de otras relativas a las regulaciones para proteger el medio marino.

Por ello, ha resaltado a través de un comunicado que el 'Ocean Viking' permanecerá bajo "detención administrativa" hasta que "se corrijan las irregularidades detectadas en la inspección". "Para algunas será necesaria la intervención del Estado pabellón, que tiene responsabilidad sobre la nave", ha añadido.

En respuesta, la ONG SOS Mediterranée, responsable del 'Ocean Viking', ha denunciado lo que ha descrito como "una maniobra flagrante de acoso administrativo" y ha dicho que el objetivo es "impedir el trabajo de los barcos de ONG para salvar vidas".

La ONG ha rechazado las acusaciones de la Guardia Costera sobre "transportar a más personas que el número certificado" y ha sostenido que durante el año que lleva realizando operaciones "el 'Ocean Viking' ha demostrado responder a los estándares de seguridad de forma superior a los que se suelen pedir a un barco".

"Está más allá de nuestra comprensión por qué se hacen ahora afirmaciones sobre la seguridad del barco ahora, cuando el estatus del mismo ha permanecido sin cambios a lo largo de cuatro inspecciones, incluidas dos realizadas recientemente por la propia Guardia Costera italiana, y sin que haya habido cambios en las regulaciones de seguridad", ha manifestado.

Por ello, el director de operaciones de SOS Mediterranée, Frédéric Penard, ha incidido en que el propietario y la oNG "siempre han respetado y garantizar un nivel máximo de seguridad para la tripulación y los supervivientes a bordo del buque".

"Lo que está claro para nosotros es que, durante los tres últimos meses, el mismo argumento sobre la seguridad ha sido usado de forma sistemática por las autoridades italianas para detener a cuatro barcos de ONG que realizan operaciones de búsqueda y rescate en el Mediterráneo central", ha lamentado.

"¿Por qué no fue la seguridad una preocupación para las autoridades marítimas cuando a principios de mes el 'Ocean Viking' tuvo que esperar once días para que se le asignara un puerto y se decretaba el estado de emergencia a bordo?", se ha preguntado Penard.

"CRISIS HUMANITARIA A GRAN ESCALA"

La ONG ha destacado que las operaciones en el Mediterráneo central suponen "hacer frente a repetidas situaciones de peligro con un potencial gran número de personas en peligro inminente a la vez" y ha recordado que la Guardia Costera italiana "ha rescatado a varios cientos de personas de una vez, a veces en pocas horas".

"Esta es la realidad de la crisis humanitaria a gran escala en el Mediterráneo", ha dicho, al tiempo que ha confirmado que "al rescatar a personas en el mar, tal y como establece el deber del capitán a ayudar a personas en peligro, el 'Ocean Viking' traslada a más personas que las especificadas en el papeleo del barco".

De esta forma, ha hecho hincapié en que "ello deriva de la propia naturaleza de las situaciones de emergencia y peligro" y ha añadido que "según las leyes marítimas, las personas que logran seguridad temporal a bordo del 'Ocean Viking' son consideradas supervivientes (...) y no pasajeros".

"Definirles así supone una interpretación desproporcionada del marco legal marítimo en el que operamos y supone ignorar de forma grave la situación en la que muchos barcos no preparados tuvieron que ser rescatados en situaciones peligrosas durante cuatro años", ha criticado.

Por último, ha señalado que debido al "acoso administrativo sistemático" contra las ONG "casi no hay barcos dedicados al rescate" en el Mediterráneo central. "Mientras, la gente sigue huyendo de Libia, especialmente porque las condiciones del verano lo permiten, y los barcos siguen en peligro en el Mediterráneo central. Se puedne ver cuerpos flotando en mitad del mar", ha relatado.

Penard ha cargado por ello contra "un patrón claro aplicado de forma excesiva y abusiva de acoso administrativo continuo contra ONG cuyo único objetivo es evitar las actividades de rescate que llenan el vacío dejado por los estados europeos sobre la materia". "Detener a la ambulancia no impedirá que la herida sangre", ha zanjado.

Los migrantes y refugiados rescatados fueron trasladados el 7 de julio a un ferry que esperará frente a la localidad siciliana de Porto Empedocle para que guarden una cuarentena y detectar así posibles casos de COVID-19, la enfermedad provocada por el nuevo coronavirus.

La ONG SOS Mediterranée había criticado que ni Italia ni Malta respondiesen a sus peticiones de desembarco. Finalmente Italia sí lo hizo, aunque no mediante un desembarco directo, sino a través de una cuarentena en un ferry que ya se ha utilizado en otras llegadas anteriores.