JARTUM, 29 Jun. (Reuters/EP) -
Efectivos de las fuerzas de seguridad del régimen militar que gobierna Sudán han irrumpido este sábado en la sede de la Asociación Profesional Sudanesa (APS), una de las principales organizaciones impulsoras de las protestas prodemocráticas.
El ataque se produce en vísperas de la gran manifestación convocada para este domingo para exigir una transición hacia un gobierno civil en el país árabe.
"Es una violación de las libertades aún peor que las del régimen del expresidente" Omar Hasán al Bashir, ha afirmado un portavoz de la APS, Ahmed al Rabie, en declaraciones a Reuters. "Es una mala señal para la atmósfera de mediación entre las dos partes", ha añadido.
Esta operación de seguridad se produce justo antes de una rueda de prensa convocada en el inmueble para informar sobre la movilización respaldada por la APS y convocada por las Fuerzas para la Libertad y el Cambio que aglutinan a la oposición y que podría reunir a un millón de personas.
La junta militar ha instado ya a la suspensión de la manifestación y ha avisado de que les hará responsables de cualquier pérdida de vidas o daños materiales causados por la marcha. La marcha aspira a ser una de las más multitudinarias desde la caída del dictador Omar al Bashir el pasado 11 de abril.
"Queremos advertir de la gravedad de la crisis que está atravesando el país, y haremos responsables a las Fuerzas para la Libertad y el Cambio de cualquier vida que se pierda en esta marcha, o de cualquier daño a los ciudadanos o a las instituciones del Estado", ha avisado el Ejército en un comunicado recogido por la agencia oficial de noticias sudanesa, SUNA.
El propio jefe adjunto del llamado Consejo Militar de Transición, el general Mohamed Hamdan Dagalo, ha advertido de la posibilidad de que se sumen a la marcha "vándalos con intenciones ocultas" para provocar un estallido de violencia. "Aquí nadie quiere problemas", ha asegurado en unas declaraciones a la televisión estatal recogidas por Reuters.
Las conversaciones entre militares y civiles están completamente colapsadas después de un brutal acto de represión efectuado a principios de mes por las fuerzas de seguridad en la capital, Jartum, donde fallecieron entre 60 y 110 personas, según fuentes de la junta y de la oposición.
Este viernes, la Unión Europea ha realizado un llamamiento a la calma durante la marcha de este domingo y ha subrayado que "cualquier acción unilateral que pueda desestabilizar aún más la situación va en contra de las legítimas aspiraciones del pueblo sudanés a la paz y la reconciliación".
Por otro lado, uno de los grupos opositores más destacados de la sociedad civil, la Asociación de Profesionales Sudaneses, ha denunciado este sábado la detención del presidente del Comité de Profesores y de un alto cargo de las Fuerzas para la Libertad y el Cambio.
"Pedimos a la comunidad internacional que exija su inmediata liberación. Estas detenciones que ha realizado la junta son enormemente contraproducentes a la hora de fomentar la confianza en este momento crucial", ha manifestado la organización en un comunicado recogido por Reuters.
