ALMATY, 18 Jul. (Reuters/EP) -
Las autoridades de Kazajistán han asegurado que el responsable del ataque perpetrado este lunes era un hombre cercano a los salafistas, seguidores de una rama ultraconservadora del Islam, y confirma así las sospechas de que el atentado tenía connotaciones de extremismo religioso.
El ataque se ha llevado a cabo en Almaty, la capital comercial de Kazajistán, y ha costado la vida a seis personas y ha dejado ocho heridos. Todo apunta a que el sospechoso, Ruslan Kulikbayev, ha actuado solo, a pesar de que los primeros indicios parecían indicar que tenía cómplices, según ha informado el ministro de Interior kazajo.
Kulikbayev, de 26 años, estuvo en prisión por robo y posesión de armas y todo apunta a que "se acercó a los salafistas" en la cárcel, según ha indicado en el Consejo de Seguridad el dirigente de los servicios de Inteligencia KNB, Vladimir Zhumakanov, .
Según el Ministerio del Interior, el atacante disparó a un policía que custodiaba una comisaría y le arrebató su fusil automático. A continuación disparó a otros dos agentes que le perseguían.
Justo después, intentó secuestrar un coche, mató a su conductor, un civil. También disparó e hirió a otros dos policías más antes de resultar herido y detenido en una concurrida calle.