WASHINGTON, 3 Nov. (Reuters/EP) -
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, ha defendido la importancia de las relaciones con Filipinas y confía en poder visitar el país asiático antes de que concluya su mandato, a principios del próximo año, a pesar de las últimas polémicas.
Kerry ha insistido en que los lazos entre los dos países son "indelebles", a pesar de las últimas declaraciones del presidente filipino, Rodrigo Duterte, que incluso llegó a calificar de "hijo de puta" a su homólogo norteamericano, Barack Obama.
"Confío en el futuro de nuestras relaciones bilaterales, sin importar una diferencia aquí o allá sobre una cosa u otra", ha dicho el jefe de la diplomacia estadounidense, precisamente en la ceremonia de toma de posesión del nuevo embajador de Filipinas, Sung Kim.
Kerry ha recordado la resistencia a Japón durante la Segunda Guerra Mundial y ha destacado que casi cuatro millones de filipinos viven en Estados Unidos. El secretario norteamericano, no obstante, ha evitado mencionar en su discurso el nombre de Duterte.