JERUSALÉN, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
El enviado especial de la ONU para Oriente Próximo, Michael Williams, manifestó hoy que los Estados miembros de las Naciones Unidas deben presionar a Hezbolá para que dé una prueba de que los dos soldados israelíes capturados el año pasado siguen con vida, según informó la agencia de noticias palestina Maan
Ehud Regev y Eldad Goldwasser fueron secuestrados por varios milicianos de Hezbolá durante una incursión en la frontera libanesa israelí el 12 de julio de 2006 lo que llevó a Israel a iniciar una guerra contra la milicia chií libanesa que duró 33 días y dejó 1.200 libaneses muertos y 160 israelíes fallecidos, la mayoría de ellos soldados.
Williams declaró ante el Consejo de Seguridad de la ONU que "desafortunadamente tengo que decir que tras trece meses de secuestro aún no tenemos ninguna prueba real de que continúen vivos". "No estoy pidiendo que les liberen y que sean llevados a su país, estoy pidiendo pruebas de que siguen con vida", concluyó.
