TEHERÁN 17 Jul. (EUROPA PRESS) -
La agencia oficial de noticias iraní, IRNA, denunció hoy el "doble rasero" y el "doble lenguaje" de los dirigentes de los ocho países más industrializados del mundo (G8), quienes en un comunicado emitido anoche pidieron la liberación de los militares israelíes secuestrados y el cese tanto de los ataques a Israel como los de las fuerzas israelíes a la franja de Gaza y Líbano sin hacer "la más mínima referencia a los crímenes sionistas en los territorios ocupados ni en Líbano, que están conmoviendo a la comunidad internacional".
Según IRNA, el presidente estadounidense, George W. Bush, intentó en un primer momento que la declaración final condenara a "los terroristas de Hezbolá por sus ataques contra Israel" y se defendiera el derecho de Israel "a defenderse", pero el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin, "se mostró reacio a que se proclamase una condena contra una de las dos partes y Bush sólo se salió con la suya a medias", indicó IRNA.
No obstante, según la agencia, "la declaración está llena de términos en los que rezuma la discriminación, pues se habla del 'ejército de Israel' frente a 'las milicias armadas de los radicales musulmanes', de 'arresto de los ministros palestinos' frente a 'secuestros de los soldados israelíes'", y se utilizan "eufemismos" tales como 'víctimas colaterales' "para referirse al centenar generosamente largo de libaneses inocentes muertos, entre los que se cuentan muchos niños".
"La única frase que vale la pena en el comunicado es aquella en la que se pide el envío de una misión observadora de parte de la ONU al sur del Líbano, propuesta que fue lanzada por la canciller alemana Angela Merkel", afirma IRNA. "Por lo demás, el documento no llega siquiera a ser un comunicado de buenas intenciones", concluye.