BEIRUT 21 Ago. (EP/AP) -
Líbano necesita unos 2.710 millones de euros para reparar los edificios y las infraestructuras dañadas por la guerra entre Israel y la milicia chií Hezbolá, y el esfuerzo de reconstrucción está siendo obstaculizado por la falta de liderazgo gubernamental, según afirmó hoy el máximo responsable del Consejo Libanés para el Desarrollo y la Reconstrucción, Fadel al Shalaq.
Al Shalaq comentó durante una entrevista concedida a la cadena de televisión CNN que este conflicto era "probablemente el más intenso" en términos de potencia de fuego y devastación desde el comienzo de la guerra civil libanesa de 1975.
Las viviendas, el transporte, las comunicaciones y el tratamiento de agua son los sectores más dañados, indicó Al Shalaq, quien sin embargo afirmó que el esfuerzo de reconstrucción no es el principal problema, dados los compromisos de ayuda sustancial recibidos desde Arabia Saudí, Kuwait y un fondo árabe.
"Lo que probablemente debería preocuparnos más es la situación política, desfavorable para lograr una rápida reconstrucción", apuntó. Según Al Shalaq, Beirut carece de un plan "y creo que el problema es la falta de liderazgo".
Por otra parte, un responsable de la ONU afirmó hoy en Ginebra que los equipos de ayuda que trabajan en Líbano han mostrado su esperanza de que muchos de los edificios que han resultado seriamente dañados puedan ser rehabilitados y han solicitado a Naciones Unidas más recursos para realizar reparaciones de emergencia para reestablecer los suministros de agua y electricidad.