BEIRUT 14 Nov. (EP/AP) -
El líder supremo de Hezbolá, jeque Hassan Nasralá, prometió hoy que seguirá con la presión junto con su movimiento para reemplazar al actual Gobierno libanés, y advirtió de que el gabinete del primer ministro, Fuad Siniora, respaldado por Occidente, no tiene ninguna credibilidad después de la dimisión de seis de sus ministros.
Nasralá, que ha amenazado con organizar manifestaciones callejeras si se ignora la petición de Hezbolá de un gobierno de unidad nacional, también aseguró a los libaneses que no habrá una nueva guerra civil como resultado de la creciente tensión política entre las facciones rivales del país.
Las declaraciones de Nasralá se producen un día después de que el Gobierno --desafiando las objeciones del mismísimo presidente del país, Emile Lahoud, quien había dudado de la legimitdad del Ejecutivo-- aprobara el tribunal internacional propuesto por la ONU para juzgar a los presuntos autores del asesinato del ex primer ministro Rafik Hariri.
La decisión de ayer del Gobierbo se produjo pese a la renuncia de sus carteras de cinco ministros chiíes (de Hezbolá y de su aliado Amal) y un ministro cristiano.