ESTOCOLMO 30 Ago. (EP/AP) -
Los organizadores de la conferencia de mañana en Estocolmo expresaron hoy su deseo de que los ministros que acudan a la misma lo hagan con un espíritu generoso con el fin de llegar a 500 millones de dólares (390 millones de euros) para ayudar a Líbano a recuperarse tras la guerra entre Israel y la milicia Hezbolá.
"Esperamos que la comunidad internacional aumente" sus ayudas, que ya han comenzado a anunciarse, declaró el portavoz del Ministerio de Exteriores sueco, John Zanchi. "La cantidad reunida indicará si esta fue una buena conferencia", añadió.
Suecia ha prometido 16 millones de euros, mientras que Italia aprobó el lunes un paquete de ayuda de 30 millones de euros. Por su parte, Rumanía ha prometido 500.000 euros.
El Gobierno libanés, junto con el Programa de la ONU para el Desarrollo (PNUD), ha identificado una amplia lista de esfuerzos urgentes de recuperación, incluida la creación de empleos, el alojamiento para los desplazados y la mejora de los servicios sociales, que será presentada a los alrededor de 60 países y organizaciones que asistirán a la conferencia.
La ministra de Ayuda sueca, Carin Jamtin, dijo que confía en que los principales países donantes estarán dispuestos a correr con la factura de la reconstrucción de Líbano. "Me sentiría decepcionada si no conseguimos el objetivo", afirmó Jamtin en el anuncio ayer de la cantidad de 390 millones de euros que se espera reunir, añadiendo que espera amplias aportaciones de Estados Unidos y de los países árabes.
Según los organizadores, hacen falta unos 59 millones de euros para dar alojamiento a unas 30.000 familias desplazadas, mientras que otros 63 millones de euros se emplearán a mejorar las infraestructuras. Otros 39 millones de euros son necesarios para la limpieza del vertido de crudo a lo largo de la costa libanesa y 34 millones de euros hacen falta para restaurar los servicios escolares del país.