BEIRUT, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Parlamento libanés ha afirmado que la delimitación de las fronteras marítimas será el asunto central de su próxima reunión, prevista para los días 3 y 4 de agosto, dentro de los esfuerzos del Gobierno del país por preservar sus derechos sobre los recursos petroleros y gasísticos descubiertos frente a las costas mediterráneas de lo que consideran un ataque por parte de Israel, que ha reclamado igualmente su derecho a explotar dichos yacimientos.
En dicha reunión se encargará a los miembros del Parlamento de los principales bloques políticos la preparación de un anteproyecto de ley que confirme los derechos de Líbano sobre dichos recursos en las zonas en conflicto, según ha informado el diario libanés 'As Safir'.
El presidente del Comité de Obras Públicas del Parlamento, Mohamed Qabbani, se ha reunido con el primer ministro, Najib Mikati, para tratar este asunto. "Nuestro objetivo es establecer una coordinación total entre el parlamento y el Gobierno para preparar el anteproyecto de ley sobre este asunto", ha afirmado Qabbani.
Una ley que dictamine las fronteras marítimas y la Zona Económica Exclusiva de Líbano es una prioridad, ha señalado Qabbani. "Estamos trabajando en prepararla para poder debatirla en la próxima reunión del Parlamento", ha agregado, según ha informado el diario libanés 'An Nahar'.
El ministro de Energía, Jebran Bassil, ha confirmado que la disputa territorial es una prioridad para el Gobierno de Mikati. "Los logros que no conseguimos hacer entre 2007 y 2011 se han alcanzado en unas pocas semanas", ha reseñado. "Si continuamos en la misma dirección, esto será un gran éxito para el Gobierno", ha agregado Bassil. "Ni Naciones Unidas ni ningún otro Estado del mundo pueden manipular las fronteras marítimas y económicas de Líbano", ha señalado.
El coordinador especial para Líbano de Naciones Unidas, Michael Williams, dijo el jueves que las disputas sobre fronteras marítimas se suelen resolver en la Convención sobre la Ley del Mar de la ONU, que incluye un panel de arbitraje independiente y que traslada las disputas ante la Corte Internacional de Justicia.
Líbano ha ratificado dicha convención, pero Israel no lo ha hecho, lo que unido a la ausencia de relaciones diplomáticas entre ambos países, complica la búsqueda de una solución. "Es difícil para Naciones Unidas dar más pasos en la situación actual", ha dicho Williams.
