DAMASCO 15 Mar. (EP/AP) -
Siria dio hoy la bienvenida al cambio de tono en el último informe de la comisión de la ONU encargada de investigar el asesinato del ex primer ministro libanés Rafik Hariri, afirmando que la versión del nuevo jefe de la comisión es menos probable que alimente las críticas contra Damasco. Los dos informes anteriores implicaban a oficiales sirios por lo que Siria ha sido duramente criticado por Estados Unidos y los países occidentales, que amenazaron con imponer sanciones, por no cooperar plenamente con la investigación.
Pero en su informe de ayer, el nuevo investigador jefe de la ONU, Serge Brammertz, dijo que hay señales alentadoras de Siria y no repitió las acusaciones hechas en octubre pasado y diciembre por el anterior investigador Detlev Mehlis. El último informe da un respiro a las autoridades sirias, por lo que ha sido recibido con cierto alivio.
"El informe fue realista y tiene mucha profesionalidad", declaró Fayssal Mekdad, viceministro sirio de Exteriores y ex embajador ante la ONU, citado por el diario gubernamental 'Al Thawra'. Según Mekdad, los informes previos han animado a los medios a emitir juicios previos, "pero el nuevo no lo hace".
"Indudablemente son malas noticias para los enemigos de Siria", afirmó el diputado sirio Mohammad Habash. Brammertz fue "claramente distinto en su valoración y estilo que su precedesor", añadió.
En el vecino Líbano, el hijo de Hariri también alabó el nuevo informe. Saad Hariri, líder del mayor bloque del Parlamento libanés que ha acusado a los sirios de matar a su padre, dijo que tiene plena confianza en la comisión y que "la verdad saldrá a la luz, no importa cuanto aquellos perjudicados por ella intenten falsear y evadir".
Por su parte, el ministro de Exteriores libanés, Fawzi Salloukh, dijo que el informe "refleja un acto importante de profesionalidad" y prometió seguir coopeando en la investigación. El Gobierno libanés, dominado por grupos anti-sirios, había alabado los dos informes anteriores también.