Malasia.- El Gobierno malasio anuncia la creación de un plan para asignar zonas específicas para la población inmigrante

Actualizado: lunes, 26 febrero 2007 11:53

KUALA LUMPUR, 26 Feb. (EP/AP) -

El Gobierno malasio ha anunciado la creación de un nuevo plan de migración que prevé ubicar a los trabajadores extranjeros en zonas determinadas alejadas de la población malasia para así tener un mayor control sobre ellos, a quienes el Ejecutivo acusa del incremento delictivo, según informó hoy el periódico 'New Straits Times'.

El diputado del Ministerio de Seguridad Interna, Fu Ah Kiow, declaró que alejar a los inmigrantes de las comunidades locales y regular sus movimientos es necesario "para mejorar la seguridad pública". "Necesitamos tener un política con la que podamos colocar a los trabajadores extranjeros en áreas designadas sin privarles de sus derechos básicos", explicó Fu.

El Gobierno malasio ha asociado en distintas ocasiones el crecimiento de la población inmigrante con el aumento del índice de criminalidad y ha desaprobado algunas de sus conductas sociales, tales como seducir a las mujeres locales o comer perros y gatos. Se estima que hay 1,8 millones de inmigrantes legales en suelo malasio y 700.000 en situación irregular. La mayoría de ellos provienen de otros países asiáticos como Indonesia, Birmania, India, Bangladesh o China y principalmente realizan tareas en la construcción o en plantaciones del país que la población malayo rechaza.

La semana pasada, el ministro del Interior, Radzi Sheikh Ahmad, adelantó que podría salir a la luz el mes próximo un nuevo anteproyecto que restrinja la entrada y situación de los inmigrantes.

Fu explicó que uno de cada tres presos en Malasia son extranjeros, y según el jefe de Policía Musa Hassan, 5.000 de los 230.000 delitos que se cometieron el pasado año tenían autoría extranjera. En este sentido, la organización de Derechos Humanos Amnistía Internacional dijo la semana pasada que el 2% de los crímenes cometidos en Malasia fueron perpetrados por trabajadores extranjeros, y añadió que esa intención de "relacionar la escalada criminal con los trabajadores extranjeros podría degenerar en tintes raciales".