LONDRES, 11 Abr. (Reuters/EP) -
La primera ministra de Reino Unido, Theresa May, ha afirmado este miércoles que todos los indicios apuntan a que las autoridades sirias estuvieron detrás del presunto ataque con armas químicas en la localidad de Duma, que dejó decenas de víctimas mortales.
"El ataque con armas químicas que tuvo lugar el sábado en Duma fue un acto bárbaro y estremecedor", ha dicho, antes de resaltar que "el uso de armas químicas no puede quedar sin respuesta".
May ha indicado que la comunidad internacional "está comprendiendo rápidamente lo que pasó sobre el terreno" y que "todos los indicios apuntan a que el régimen sirio es el responsable".
"Trabajaremos con nuestros aliados más cercanos para considerar cómo podemos garantizar que los responsables rinden cuentas y cómo podemos evitar y disuadir la catástrofe humanitaria que supone el uso de armas químicas en el futuro", ha agregado.
Los rebeldes y los gobiernos de países como Estados Unidos, Francia y Alemania han acusado al Gobierno sirio de estar detrás del ataque --que dejó al menos 60 muertos y un millar de heridos--, lo que ha sido rechazado tanto por Damasco como por Moscú, su principal valedor diplomático.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha reclamado este mismo miércoles acceso a Duma después de que se haya constatado que 500 personas mostraron "síntomas que encajan con la exposición a químicos tóxicos" tras el citado ataque.
Durante la jornada, el Ministerio de Exteriores de Siria ha acusado al Gobierno de Estados Unidos de basarse en "mentiras" para justificar ataques contra su territorio, después de que el presidente norteamericano, Donald Trump, haya sugerido que ordenará un ataque con misiles.
Por su parte, el Ejército de Rusia ha afirmado que el ataque fue "un montaje" organizado por el grupo de defensa civil conocido como 'cascos blancos'.
