PODGORICA, 19 Oct. (Reuters/EP) -
Varios miles de personas se han manifestado este domingo en la capital de Montenegro, Podgorica, para pedir la dimisión del primer ministro, Milo Djukanovic, y la formación de un Gobierno de unidad.
Las fuerzas de seguridad han acordonado los edificios gubernamentales, incluido el Parlamento y la oficina de Djukanovic, lo que ha provocado enfrentamientos con un pequeño grupo de manifestantes que quería llegar hasta este último.
Andrija Mandic, un líder del principal bloque opositor Frente Democrático, ha reclamado a los manifestantes que no recurran a la violencia y ha subrayado que las protestas continuarán, a menos que sus demandas sean satisfechas antes del sábado.
"Si el sábado no se ha formado un Gobierno interino y Djukanovic no ha abandonado el cargo, la gente vendrá a Podgorica desde todos los puntos de Montenegro", ha señalado.
Este mismo domingo, la coalición gubernamental y los partidos de oposición han acordado convocar una sesión extraordinaria del comité de Seguridad del parlamento para investigar si la Policía hizo un uso excesivo de la fuerza durante las protestas del sábado.
La Policía utilizó gases lacrimógenos para dispersar la protesta y retirar las tiendas de campaña instaladas en los alrededores del Parlamento por seguidores del Frente Democrático que reclamaban la dimisión de Djukanovic.
El organismo ha determinado que durante las protestas, que se extendieron durante las últimas tres semanas, "se produjeron actividades que amenazaron el orden constitucional, la estabilidad y la seguridad de los ciudadanos y sus propiedades", recalcando que la actividad policial "respondió al comportamiento y a la resistencia de los participantes".
Los críticos sostienen que el pequeño país adriático, con 680.000 habitantes, está gobernado como un feudo por una élite política que no ha variado en los últimos 20 años, descripción que el Gobierno rechaza.
Montenegro es candidato a formar parte de la Unión Europea y espera recibir una invitación a finales de año para unirse a la OTAN. El próximo año, el país celebrará elecciones parlamentarias
Sin embargo, los Gobiernos occidentales y muchos grupos en defensa de los Derechos Humanos han expresado su preocupación en torno al nivel de crimen organizado y corrupción que existe en el país, que floreció especialmente durante la desintegración de Yugoslavia en la década de los noventa.