TRÍPOLI, 12 Abr. (Reuters/EP) -
La milicia de Zintan que tiene en su poder a Saif al Islam, hijo del ex líder libio Muamar Gadafi, ha mostrado su intención de juzgarle en la localidad en lugar de entregarle a las autoridades libias o al Tribunal Penal Internacional (TPI), según ha señalado el abogado a cargo del caso de Saif al Islam, Ahmed al Jehani.
Al Jehani, que también es el vínculo entre el Gobierno libio y el TPI, ha indicado que "algunos de los rebeldes consideran que si entregan (a Saif al Islam) a Trípoli podría escapar". Asimismo, ha apuntado que Trípoli está intentando explicar con la milicia de Zintan que no actúan a favor de Libia si no entregan a Saif al Islam.
"Estamos intentando convencer a los rebeldes de Zintan que no combatieron y sacrificaron todo esto por Zintan, sino por Libia, y hemos encontrado a algunos que quieren escuchar", ha agregado.
Sin embargo, el portavoz del consejo local de Zintan, Jaled al Zintani, ha dicho a Reuters que algunos en la ciudad --y también en Libia-- no confían en el débil Gobierno central porque la seguridad sigue siendo un problema en el país.
"No tenemos problema en entregarle (a Saif al Islam) al Gobierno tan pronto como prueben que tienen la seguridad correcta para proteger a alguien como Saif", ha manifestado Al Zintani.
En este sentido, ha recordado que muchos seguidores de Gadafi siguen viviendo en Trípoli y que intentarán ayudar a Saif al Islam a huir. "Este hombre tiene mucho dinero y muchos seguidores en Trípoli", ha valorado.
ACUSACIONES DE TORTURA
Los abogados asignados para la defensa de Saif al Islam en el TPI denunciaron la semana pasada que el hijo de Gadafi está sufriendo malos tratos durante su cautiverio en la ciudad de Zintan. A través de un comunicado, estos abogados denunciaron el aislamiento y los golpes de los que supuestamente es víctima Saif al Islam, a quien transmitieron inicialmente que no podía ser procesado en Libia por "delitos graves".
Las autoridades libias llegaron a decir al detenido y a sus abogados que sólo tenían pruebas de delitos menores por presuntas irregularidades en su permiso para camellos y en la gestión de una piscifactoría, según un comunicado que recogió la cadena británica BBC.
Sin embargo, en un "cambio radical" de opinión, y en vista de que vencía el plazo para entregar a Saif al Islam al TPI, las autoridades libias variaron su versión y decidieron que querían investigarle por crímenes de guerra, lo que le ha dejado en "un agujero negro legal" y "privado de sus derechos".
El Consejo Nacional de Transición (CNT) de Libia reiteró el miércoles su intención de juzgar en el país a Saif al Islam después de que el TPI solicitase su entrega inmediata a La Haya tras rechazar una segunda prórroga solicitada desde Trípoli.
Un portavoz del Gobierno provisional libio, Nasser al Manee, dio por "completados" los preparativos para construir una "prisión central" en Trípoli a la que será trasladado Saif al Islam para su posterior juicio.
El TPI, que había dictado una orden de arresto sobre Saif al Islam en junio del año pasado por la muerte de manifestantes opositores, solicitó a las autoridades de Libia su entrega "inmediata", al entender que los argumentos presentados por el CNT no son válidos para evitar su traslado a La Haya. La sala del tribunal responsable del caso libio recordó la "obligación" de entregar al detenido.