Archivo - El ministro de Exteriores de Israel, Eli Cohen - Bernd von Jutrczenka/dpa - Archivo
MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Exteriores de Israel, Eli Cohen, ha cargado este miércoles contra la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, por sus comentarios sobre la polémica propuesta de reforma judicial, que desencadenó unas movilizaciones sin precedentes que forzaron al primer ministro, Benjamin Netanyahu, a suspender el proceso legislativo para iniciar contactos con la oposición.
Cohen ha indicado en una entrevista concedida a la cadena de televisión pública israelí Kan que Harris "no sería capaz de citar una sola cláusula de la reforma judicial", después de que la vicepresidenta destacara que el sistema judicial del país debe seguir siendo independiente.
"No sé si se ha leído el proyecto de ley o no, pero mi valoración es que no lo ha hecho", ha señalado, según ha recogido el diario 'The Times of Israel'. "En los lugares que he visitado he preguntado a la gente qué les preocupa (de la reforma) y nadie puede indicar qué es lo que les preocupa", ha sostenido.
En respuesta, el embajador estadounidense en Israel, Tom Nides, ha señalado en declaraciones a la cadena de televisión israelí Channel 12 que "respeta" a Cohen, si bien ha incidido en que "la vicepresidenta dijo cosas que la Administración comenta en cada oportunidad que tiene sobre los valores y políticas compartidas".
"Harris es un firme apoyo de Israel", ha sostenido Nides, tras lo que Cohen ha publicado un comunicado en el que ha expresado su "profundo respeto" por Estados Unidos, al que ha descrito como "un aliado", y por la propia Harris, de la que ha dicho que "es una verdadera amiga de Israel".
Así, Cohen ha aseverado que "la reforma legal en Israel es un asunto interno que está en estos momentos en proceso de consolidación y diálogo", antes de asegurar que "el Estado de Israel seguirá siendo democrático y liberal, como siempre ha sido".
La Administración de Joe Biden ha criticado en varias ocasiones la propuesta de reforma judicial, si bien ha rebajado el tono tras la suspensión de los procedimientos en el Parlamento y el inicio de un diálogo entre el Gobierno y la oposición, proceso que cuenta con la mediación del presidente israelí, Isaac Herzog.
Los críticos con la reforma judicial argumentan que se trata de un ataque al equilibrio de poderes de Israel, fundamentalmente a las bases en las que se asienta la democracia, ya que concede al Parlamento una influencia inusitada para revocar decisiones judiciales.