MSF denuncia el incremento de los bombardeos y las víctimas en la región de Damasco

MADRID, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -

Médicos Sin Fronteras (MSF) ha denunciado este viernes que agosto ha sido "uno de los meses más sangrientos" en Siria, en particular en la zona de Ghuta Este, cerca de Damasco, donde la organización brinda apoyo a hospitales provisionales que han visto incrementarse el número de víctimas civiles que reciben.

El personal de estos hospitales ha indicado a MSF que en las últimas semanas han tratado al menos 150 pacientes al día por heridas
de guerra. Como consecuencia de ello, los trece hospitales provisionales que reciben apoyo de MSF en Ghuta Este se han visto, de
forma casi permanente, desbordados por la llegada de pacientes con heridas traumáticas entre el 12 y el 31 de agosto, ha precisado la ONG en un comunicado.

Según los datos de seis de los centros, se han registrado 377
muertes y han resultado heridas 1.932 personas. MSF ha denunciado que una de cada cuatro víctimas --104 fallecidos y 546 heridos-- eran menores de 15 años. La intensidad de los bombardeos ha afectado las líneas de comunicación, por lo que MSF no ha podido recabar datos
detallados del resto de hospitales a los que presta apoyo.

"Este es uno de los meses más sangrientos en Siria desde el horrible ataque con armas químicas de agosto de 2013", ha reconocido el doctor Bart Janssens, director de Operaciones de MSF. "Está claro que, cada día, ha habido al menos 150 heridos de guerra en Guta
Este durante esas 20 jornadas de ataques", ha añadido.

Según ha explicado, "los hospitales que apoyamos son estructuras
provisionales en las que conseguir un medicamento resulta muy arriesgado, y en este contexto es impensable que los centros tengan la capacidad para afrontar tal intensidad de emergencias".

"El inquebrantable esfuerzo de los médicos sirios por salvar vidas en estas circunstancias es absolutamente impresionante, pero la situación ha llegado a unos límites totalmente inaceptables", ha advertido.

"Agosto ha sido el peor mes del que hemos sido testigos desde un punto de vista médico", ha asegurado el director de uno de los hospitales en las áreas sitiadas. "Cualquiera que no está
herido o muerto puede considerarse afortunado. ¡Ya está bien de miseria y sangre! ¡Ya está bien!", ha reclamado.

ASEDIO ALREDEDOR DE DAMASCO

Por otra parte, la organización médico-sanitaria ha indicado que el asedio alrededor de Damasco se ha acrecentado y extendido y desde el pasado 22 de julio tres nuevas áreas al norte de la ciudad (All Tall, Hameh y Qudsaya) y sus 600.000 habitantes se encuentran cercados. Esto implica que las personas son detenidas y registradas y que no se permite la entrada de suministros, comida, combustible u otros
productos básicos, ha precisado.

Además, el sitio en zonas como Muadamiya se ha intensificado, con lo que no solo están bloqueados los suministros médicos y la comida, sino que incluso el paso de personas está suspendido. Ahora más que nunca, las evacuaciones médicas resultan imposibles, incluso para aquellos pacientes que necesitan con urgencia atención médica vital y avanzada, ha alertado la ONG.

"El asedio se traduce en que estas comunidades carecen de bienes básicos esenciales para su supervivencia", ha incidido Bart Janssens. "Estamos al tanto de casi 400 amputaciones llevadas a cabo en Ghuta Este en agosto. Muchas de ellas se podrían haber evitado si no hubiera tantos obstáculos para la atención médica en la zona. Aunque aún podemos hacer llegar algunos suministros médicos a través del frente, cada vez nos resulta más complicado", ha precisado.

MSF está organizando el suministro urgente de material médico (5.000 bolsas de suero intravenoso y 1.500 de sangre) para reabastecer unas existencias que están casi agotadas en los centros.