Muere un civil durante los enfrentamientos entre los manifestantes y las fuerzas de seguridad en Sudán

Publicado: domingo, 7 abril 2019 3:00

JARTUM 7 (Reuters/EP)

Un civil ha muerto y varios han resultado heridos este sábado durante las protestas en la ciudad sudanesa de Omdurman, tras el enfrentamiento de miles de manifestantes con las fuerzas de seguridad en varios puntos del país.

La víctima era un médico de laboratorio, según un comunicado emitido por el Comité de Médicos de la oposición y recogido por Reuters. El personal médico ha desempañado un papel fundamental en estas protestas en las que decenas de personas han muerto en los últimos meses.

Cientos de sudaneses se han dirigido este sábado hacia la residencia del presidente del país, Omar al Bashir, y a la sede del Ministerio de Defensa, ambas en el centro de la capital, Jartum, en un nuevo episodio de las protestas contra el Gobierno que comenzaron a finales del año pasado.

Las fuerzas de seguridad han disparado gases lacrimógenos a los manifestantes de Omdurman y a aquellos que lanzaban piedras cerca de la residencia de Bashir.

Durante la concentración --que pide la renuncia de Omar al Bashir-- los asistentes agitaron banderas sudanesas y cantaron consignas como "libertad, paz y justicia".

"Hoy hemos ganado y confiamos en que el régimen caerá", ha dicho Mohamed Saleh, un profesor universitario de 63 años.

El ministro de Información y portavoz del Gobierno, Hassan Ismail, ha elogiado el papel de las fuerzas de seguridad durante la protesta por la forma en la que han controlado la manifestación y ha anunciado que el Gobierno está "dispuesto a dialogar para resolver esta crisis".

Al menos 60 personas han muerto en el marco de la represión gubernamental de las protestas que se suceden desde diciembre de 2018 contra el presidente de Sudán, según ha informado este viernes la organización Physicians for Human Rights (PHR).

El estado de emergencia decretado en febrero por las autoridades sudanesas no ha conseguido aplacar a la población, que exige reformas inmediatas.

El propio Al Bashir describió como "legítimas" las demandas de los participantes en las manifestaciones, pero acusó sin embargo a algunos de los manifestantes de destruir propiedades públicas y privadas y alterar el orden público, al tiempo que acusó a ciertas partes de aprovechar las protestas para lograr una "agenda excluyente".

Por otra parte, defendió que, en respuesta a las protestas, el Gobierno ha apostado por "una 'hoja de ruta' para una transición política" fundamentada en un "diálogo amplio dentro de los límites constitucionales".

Al Bashir --en el poder desde que encabezara un golpe de Estado en 1989-- ha responsabilizado en el pasado de las protestas a "agentes" extranjeros y ha retado a sus rivales a tratar de llegar al poder a través de las urnas. Asimismo, ha advertido de que no permitirá ninguna 'Primavera Árabe', en alusión a la ola de protestas que sacudió Oriente Próximo y el norte de África en 2011.

Sobre Al Bashir pesa una orden de arresto del Tribunal Penal Internacional (TPI) por genocidio y crímenes contra la Humanidad por los presuntos abusos cometidos en la provincia de Darfur. Hasta ahora se ha librado del procesamiento al evitar su detención viajando sólo a países aliados.

Leer más acerca de: