Nepal.- La alianza opositora recomienda al líder del Congreso Nepalí, Girija Prasad Koirala, como nuevo primer ministro

KATMANDU 25 Abr. (EUROPA PRESS) -

La alianza de siete partidos de la oposición recomendó hoy al presidente del Congreso Nepalí (NC, principal partido del país), Girija Prasad Koirala, para el cargo de primer ministro, después de que el rey Gyanendra cediera finalmente ayer a las presiones de la población y la oposición y accediera a restaurar el Parlamento, disuelto desde mayor de 2002.

El secretario general del UML, Madhav Kumar Nepal, y el presidente del Congreso Nepalí- Democrático, Sher Bahadur Deuba, propusieron a Koirala para el cargo, propuesta que fue refrendada por toda la alianza. Koirala, de 83 años, ha sido primer ministro del reino en tres ocasiones, de 1991 a 1994, de 1998 a 1999, y de 2000 a 2001.

Asimismo, durante la reunión mantenida hoy por la alianza opositora se acordó la convocatoria de elecciones a la Asamblea Constituyente una vez restaurado el Parlamento. "El anuncio de elecciones a la Asamblea Constituyente será el principal punto de la agenda del restaurado Parlamento", indicó el secretario general del NC, Ram Chandra Paudel, al portal de información 'eKantipur', tras la conclusión de la reunión. "El pueblo tomará su decisión a través de estas elecciones", añadió.

Previamente, la alianza había dado la bienvenida al anuncio de ayer del monarca de restaurar la Cámara de Representantes, disuelta desde mayo de 2002 --entonces a petición del primer ministro de la época, Sher Bahadur Deuba, para la convocatoria de elecciones que nunca llegaron a celebrarse--, considerando que con ello se abren las puertas para la resolución de la crisis política que atraviesa el país.

Padel subrayó que los siete partidos seguirán adelante "manteniendo el espíritu de los manifestantes y de la 'hoja de ruta' de la alianza en base a doce puntos de entendimiento con los maoístas". "Estamos comprometidos con los doce puntos de entendimiento y conseguiremos nuestros objetivos", prometió.

Por su parte el secretario general del NC-Democrático, Prakash Man Singh, consideró que se trata de una victoria política del pueblo nepalí y de la alianza opositora. "Los partidos impulsarán ahora el proceso para resolver la actual crisis a través de las instituciones representativas del pueblo", afirmó.

Según Singh, tras la restauración de la Cámara, se formará un gobierno integrado por todos los partidos para mantener un diálogo con los rebeldes maoístas y atraer a estos al proceso político pacífico y a continuación "comenzará el proceso para las elecciones a la Asamblea Constituyente".

Por otra parte, la alianza opositora ha desconvocado al huelga general en la que vivía sumido el país desde el pasado 6 de abril y ha transformado los actos de protesta previstos para hoy en actos de celebración de la victoria del pueblo. De hecho, ya ayer miles de nepalíes se echaron a las calles en la capital para celebrar la declaración del monarca.

RECHAZO DE LOS MAOISTAS

Sin embargo, pese a que la alianza opositora ha expresado su deseo de negociar con los rebeldes maoístas, y a que éstos habían apoyado hasta ahora la huelga general contra el rey, estos divulgaron hoy un comunicado en el que rechazan la decisión del monarca de restaurar el Parlamento, según informa la agencia AP.

Los rebeldes consideran que se trata de una "conspiración" del monarca contra el pueblo para seguir ostentando el poder y advierten a sus aliados de la oposición de que no acepten esta decisión. La declaración de los maoístas, firmada por su líder Prachanda y por su 'número dos' Baburam Bhattarai y enviada por correo electrónico a los medios de comunicación, promete seguir presionando con bloqueos que han sellado las principales carreteras durante semanas y llevado a importantes carestías de alimentos y combustible en la capital.

Asimismo, advierten de que cualquier partido que acceda al plan del monarca estará traicionando a los maoístas, cuya campaña de 10 años para conseguir la instauración de un Estado comunista en el reino ha dejado más de 13.000 muertos y les ha dado el control de gran parte de las zonas rurales. Los rebeldes habían apoyado hasta ahora a la alianza opositora durante las tres semanas de huelga general que han paralizado el país y que han llevado al rey Gyanendra a tomar la decisión de restaurar el Parlamento.