KATMANDU 17 Abr. (EP/AP) -
El Gobierno nepalí anunció hoy el despliegue de escoltas armados para los camiones que abastecen de alimentos a Katmandú, donde hoy se registraron nuevas manifestaciones contra el rey Gyanendra y que permanece bloqueada debido a la huelga general decretada hace ya doce días por la alianza de siete partidos de la oposición en protesta contra el régimen autoritario del monarca.
El Ejecutivo monárquico también ofreció incentivos monetarios a los conductores que desafíen la huelga en Katmandú, donde los suministros de bienes esenciales comienzan a escasear y hoy volvieron a producirse nuevas manifestaciones. La huelga general, que cuenta con el respaldo de los rebeldes maoístas, ha forzado a muchos vehículos a abandonar las carreteras y han mantenido los mercados cerrados en muchas ciudades en todo el país desde que comenzó el pasado 6 de abril.
La Policía disparó gases lacrimógenos y arremetió hoy contra los manifestantes en la zona turística de Thamel, en Katmandú. Los empleados de hoteles y restaurantes se habían congregado en el corazón del distrito turístico para una protesta pacífica pero la Policía cargó contra ellos golpeándoles con sus porras.
El 1 de febrero de 2005 el rey Gyanendra destituyó el gobierno democráticamente electo y asumió todo el poder, argumentando que la medida era necesaria para combatir a los rebeldes maoístas, cuya insurgencia ha dejado más de 13.000 muertos en la última década. Los maoístas, tras años bloqueando las elecciones, apoyan ahora la huelga convocada por la alianza opositora reclamando la vuelta a la democracia.
"Proporcionaremos escolta armada a los camiones que transportan bienes esenciales a Katmandú", indicó el secretario del Ministerio de Trabajo y Obras Públicas, Dipendra Thapa. El Gobierno también anunció un pago de incentivos de 3.500 rupias (40 euros) a los camioneros que rompan la huelga y transporten alimentos, combustible y otros bienes esenciales por las carreteras de Nepal, único medio de transporte en gran parte del reino.
Por otra parte, el Gobierno también obligó hoy a varias estaciones de servicio de Katmandú a abrir y distribuir de forma racionada gasolina y diesel. En estas gasolineras, numerosas motocicletas y vehículos hicieron fila, vigilados por la Policía y el Ejército.