MADRID, 19 May. (EUROPA PRESS) -
La Presidencia de Burundi ha asegurado este martes que no existe ningún "plan de venganza" tras el fallido golpe de Estado de la semana pasada contra el presidente Pierre Nkurunziza y que los artífices del mismo serán juzgados por los tribunales y castigados conforme a las leyes.
En un comunicado, la Presidencia ha indicado que "desde el fin de las operaciones militares de restablecimiento del orden constitucional, el Gobierno, así como sus diferentes servicios, no tienen ni tendrán jamás un plan de 'venganza'".
"Las personas implicadas en la vergonzosa tentativa de derrocar las instituciones legítimas serán detenidas y procesadas por la justicia y únicamente por esta", ha asegurado la Presidencia burundesa, subrayando que "corresponderá a ella fijar los castigos, según contempla la ley".
El miércoles pasado el general Godefroid Niyombaré, con el apoyo de altos cargos militares y de la Policía, anunció la destitución de Nkurunziza en rechazo a los planes del presidente de presentarse a un tercer mandato. El mandatario se encontraba en Tanzania en una cumbre precisamente sobre la crisis en Burundi y regresó al país el jueves.
La decisión del presidente ha generado protestas desde hace tres semanas en el país que han dejado más de una veintena de muertos. Los manifestantes consideran que la Constitución y el acuerdo de paz de Arusha con el que terminó la guerra civil en 2005 prohíben más de dos mandatos, pero el presidente, al que ha dado la razón el Constitucional, sostiene que su primer mandato fue por designación del Parlamento y no de los ciudadanos.
