El ministro de Exteriores sirios asegura que su país está dispuesto a cooperar para facilitar el diálogo entre sirios
DAMASCO, 15 (DPA/EP)
El nuevo enviado especial de Naciones Unidas para Sirai, Geir Pedersen, ha prometido este martes dedicar todos sus esfuerzos a lograr una solución política que ponga fin a la crisis que vive Siria desde mediados de 2011.
Pedersen se ha reunido este martes en Damasco, la capital siria, con el ministro de Asuntos Exteriores sirio, Walid al Moallem, en el marco de una visita de tres días al país, la primera que realiza desde que asumió el cargo a finales de 2018.
De acuerdo con la agencia de noticias oficial siria SANA, Pedersen se ha comprometido a hacer todos los esfuerzos posibles para lograr una solución posible de acuerdo con los principios de la Carta de Naciones Unidas.
El enviado de Naciones Unidas ha dicho al jefe de la diplomacia siria que la ONU está comprometida con la soberanía, la independencia, la integridad territorial y la unidad de Siria. Por su parte, Al Moallem ha dicho que su país está dispuesto a cooperar con Naciones Unidas "para facilitar el diálogo entre sirios con la vista puesta en alcanzar una solución política a la crisis en Siria, para eliminar el terrorismo y poner fin a la presencia extranjera".
El régimen sirio suele culpar a la coalición militar que lidera Estados Unidos para combatir a Estado Islámico y a Turquía, que tiene tropas en el norte, de estar ocupando ilegalmente territorio sirio. Pedersen es el cuarto enviado especial nombrado por Naciones Unidas desde que comenzó la guerra en 2011. El diplomático noruego ha asumido el cargo en enero, tras la renunciad de su antecesor, Staffan de Mistura, en 2018.
Antes de De Mistura, el exsecretario general de la ONU Kofi Annan y el diplomático argelino Lajdar Brahimi trataron de impulsar una solución a la guerra de Siria pero los dos dimitieron antes de concluir su mandato y sin haber tenido éxito en su cometido.
Ahora corresponderá a Pedersen tratar de impulsar un acuerdo de paz que ponga fin a una guerra que ha dejado más de 400.000 muertos y que ha provocado la huida de millones de personas.
