MADRID, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Nepal, Sushil Koirala, ha jurado este martes su cargo ante el presidente, Ram Baran Yadav, según ha informado el diario semioficial nepalí 'The Rising Nepal'.
El Parlamento eligió el lunes a Koirala como nuevo primer ministro tras un acuerdo de reparto de poder de último minuto que ha puesto fin al punto muerto que había tras las elecciones de hace dos meses.
Koirala, líder del centrista partido del Congreso Nepalí, ha sido elegido con el apoyo del partido comunista UML, el segundo por número de escaños en el Parlamento.
Nepal ha sido escenario de conflicto, inestabilidad y división política desde hace años. El país funciona bajo una Constitución interina desde 2008, cuando quedó abolida la monarquía.
Koirala, de 76 años, es el cuarto miembro de su familia en ocupar el cargo de primer ministro. Tenía que ser elegido por una mayoría en el Parlamento y su partido solo tenía 194 escaños de los 601 totales, pero finalmente ha conseguido 405 votos.
El UML está integrado por comunistas con puntos de vista políticos más liberales en comparación con los antiguos rebeldes maoístas que mantuvieron una guerra civil en el país hasta 2006. Los dirigentes del UML eran reacios inicialmente a apoyar a Koirala pero finalmente aceptaron después de que éste se comprometiera a celebrar elecciones presidenciales el próximo año.
Koirala toma el relevo de Khil Raj Regmi, el presidente del Tribunal Supremo que ha encabezado un gobierno interino desde marzo del año pasado. Ahora tendrá la labor de supervisar la elaboración de una nueva Constitución, una de las condiciones del acuerdo de paz de 2006 que puso fin a una década de guerra civil.
La nueva carta magna no se ha cerrado por las diferencias sobre el curso político que la nueva república debería adoptar. El intento anterior por redactarla fracasó tras expirar en 2012 el mandato de una asamblea constituyente.
TRAYECTORIA
Koirala, tres de cuyos primos han servido como primeros ministros, carece de experiencia en administración pública y nunca ha ocupado ningún cargo en el Gobierno cuando su partido estuvo en el poder durante buena parte de los últimos 23 años.
Sin embargo, es conocido como un político con un pasado limpio y pasó seis años en prisión en Nepal e India durante la lucha por la democracia en el país desde los años 1950.
"La nueva constitución es posible solo cuando haya consenso y unidad entre todos los partidos políticos. Mi gobierno luchará para ello", ha asegurado Koirala ante el Parlamento.
Los antiguos rebeldes maoístas, que han dominado los gobiernos desde que abandonaron las armas, sufrieron una contundente derrota en las elecciones. Según ayudantes de Koirala, se les ofreció participar en el nuevo gabinete pero lo han rechazado.
