MADRID, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
La oficina de gabinete del Gobierno de Reino Unido ha ordenado a los distintos departamentos ministeriales que dejen de instalar cámaras de vigilancia fabricadas por empresas chinas en sitios considerados "sensibles" por motivos de seguridad.
El canciller del ducado de Lancaster, Oliver Dowden, ha indicado en un comunicado que, tras una revisión de seguridad, ningún equipo de este tipo debería volver a conectarse a las redes centrales, especialmente en los sitios más sensibles, según ha informado la cadena BBC.
En este sentido, desde el Gobierno británico han expresado que, dado que las empresas en China deben cumplir con la ley de inteligencia nacional, que les exige cooperar con los servicios de inteligencia chinos, ya no deberían utilizarse porque suponen un riesgo para Reino Unido.
"Dado que las consideraciones de seguridad siempre son primordiales en estos sitios, estamos tomando medidas ahora para evitar que se materialice cualquier riesgo de seguridad", ha dicho Dowden, según ha recogido la cadena Sky News.
Esta medida se produce después de que el primer ministro británico, Rishi Sunak, haya reconocido que Pekín representa un "desafío sistémico" en el marco de la cumbre del G20 que se celebró la pasada semana en Bali, Indonesia.
