MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
La escalada de tensiones en Sudán se ha saldado con asaltos a hospitales y ataques a trabajadores, con casos incluso de abusos sexuales, según ha denunciado este viernes la Organización Mundial de la Salud (OMS), "enormemente preocupada" por el impacto de la violencia que sacude principalmente la capital, Jartum.
El director de la OMS para la región oriental del Mediterráneo, Ahmed al Mandhari, ha denunciado en nombre de la organización "incursiones" en varios hospitales de la capital. Entre sus efectos, figuran el cierre de los servicios de urgencia, el traslado sin control de los pacientes y heridas a cinco trabajadores y pacientes.
"Parece que los trabajadores médicos han sido atacados por cumplir con su deber y proporcionar asistencia a los heridos", ha apuntado Al Mandhari, apenas cinco días después de que el violento desalojo de un campamento de protesta se saldase con decenas de víctimas mortales. La junta militar que gobierna Sudán ha reconocido 61 víctimas mortales, pero desde la oposición elevan la cifra por encima del centenar.
Los hospitales de campaña habilitados para atender a los heridos han sufrido destrozos e incendios, así como el saqueo de equipos. La OMS también ha alertado en su comunicado de denuncias sobre presuntas violaciones de mujeres implicadas en estas tareas de asistencia médica.
"Estas acciones representan una violación total e inaceptable de los Derechos Humanos y deben cesar", ha subrayado Al Mandhari, que ha instado a dejar la asistencia médica al margen de cualquier consideración y lucha política. "Los trabajadores médicos deben poder tratar a los heridos y enfermos sin tener que preocuparse por su seguridad o la de sus pacientes", ha apostillado.
La OMS seguirá vigilando de cerca la situación y colaborando con el Ministerio de Sanidad para que los hospitales puedan seguir "operativos" y la población tenga acceso a medicamentos básicos. La agencia ya ha enviado nueve camiones con suministros a Jartum.
