La ONU anuncia el aplazamiento de la conferencia nacional en Libia a causa de la ofensiva de Haftar

Salamé asegura que trabajará para intentar que la conferencia se celebre "lo antes posible"

Ghassan Salamé, enviado de la ONU para Libia
REUTERS / HANI AMARA - Archivo
Europa Press Internacional
Actualizado: martes, 9 abril 2019 20:46

MADRID, 9 (EUROPA PRESS)

El enviado especial de Naciones Unidas para Libia, Ghasán Salamé, ha anunciado este martes su decisión de aplazar la conferencia nacional que se iba a celebrar en Ghadamés entre el 14 y el 16 de abril debido a la ofensiva lanzada contra la capital por las fuerzas del mariscal de campo Jalifa Haftar.

En su comunicado, Salamé ha destacado que "la decisión de celebrar la conferencia nacional se adoptó debido a que la situación había madurado y a que las condiciones necesarias se habían cumplido para permitir una solución efectiva a la crisis libia a través de un acuerdo político, el establecimiento de una Carta Nacional y compromisos que podrían haber puesto al país en el camino de la recuperación, la paz, la unidad, la soberanía y una vida decente para la población".

Así, ha recordado que "esta era la creencia en las últimas semanas tras un año y medio de extensas consultas" en las que "la mayoría de los actores" se mostraron conformes con impulsar una solución política en torno a "opciones prácticas" que serían discutidas en esta conferencia nacional.

"Empezamos a invitar a los presentes a la conferencia, no para crear una nueva estructura entre cierta élite política ni para 'compartir un pastel', sino para discutir opciones y garantizar que los resultados de la conferencia eran aceptables para todos los libios y en línea con lo que se discutió durante el proceso de consultas", ha explicado.

Salamé ha expresado por ello su "dolorosa decepción" al "oír de nuevo los tambores de la guerra" y "ver el lanzamiento de una ofensiva", en referencia a los avances hacia la capital, Trípoli, de las fuerzas de Haftar, leal al gobierno asentado en el este del país.

En este sentido, ha recalcado que esta ofensiva "eclipsa el proceso político y la esperanza de unos avances buscados y socava la confianza necesaria para lanzar un diálogo significativo", al tiempo que ha asegurado que trabajará para intentar que la conferencia se celebre "lo antes posible".

"Los graves acontecimientos sobre el terreno deben ser tratados con la responsabilidad y el tiempo que requieren", ha dicho, antes de insistir en que "no se debe desperdiciar la oportunidad histórica de la conferencia o la oportunidad de alejarse del pasado, en el que los libios han experimentado tragedias y han presenciado un deterioro de las condiciones de vida, el agotamiento de sus recursos y su paciencia".

Por ello, Salamé ha dicho que "hará todo lo posible para lograr la unificación cuanto antes de las instituciones políticas y económicas, el establecimiento de un Estado soberano, civil y democrático que respete los derechos de todos los ciudadanos, dé justicia a todas las regiones y grupos sociales y garantice una transición pacífica en la que sólo las urnas sean las adjudicatarias".

"NO PERDER UNA OPORTUNIDAD HISTÓRICA"

"Reitero que estoy más decidido que nunca a celebrar la conferencia nacional en la primera oportunidad posible, ya que no podemos permitirnos que se pierda la oportunidad histórica existente", ha manifestado.

"Tampoco podemos pedir a los libios que acudan a una conferencia en el contexto de disparos de artillería y operaciones aéreas, ya que debemos garantizar que todos los que han manifestado su deseo de responder a este acontecimiento histórico y nacional en todo el país pueden acudir y pueden expresar sus opiniones libremente", ha agregado.

Por último, ha destacado que trabajará "día y noche" para que la conferencia se celebre "una vez las condiciones permitan que tenga lugar y sea restablecida" y para "poner fin a la actual escalada militar, garantizar que la razón y el interés nacional sustituyen a la fuerza y enmendar las diferencias externas para permitir la resolución a la crisis en Libia".

La Misión de Apoyo de Naciones Unidas para Libia (UNSMIL) ha asegurado durante la jornada que seguirá trabajando desde Trípoli, incluida la presencia de Salamé, si bien parte de su personal ha abandonado las instalaciones y trabajará desde Túnez, según la agencia de noticias Reuters.

REUBICACIÓN DE 150 REFUGIADOS

Por otra parte, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha anunciado este mismo martes la reubicación de 150 refugiados que se encontraban en el centro de detención de Ain Zara, en el sur de Trípoli, ante los combates.

El centro se ha visto afectado por los enfrentamientos durante los últimos días, lo que ha desencadenado los temores de los presentes por su seguridad y ante la escasez de recursos.

ACNUR ha resaltado que ha recibido informaciones sobre "situaciones similares" en otros centros de detención y está analizándolas. La reubicación de hoy es la primera de este tipo en el marco de la ofensiva de Haftar.

"Muchos refugiados y migrantes en Libia sufren perversiones terribles. Ahora están ante un grave riesgo adicional y no deben ser ignorados en los esfuerzos para alejar a los civiles de la zona de peligro y llevarlos a zonas en las que estén más seguros", ha explicado Matthew Brook, 'número dos' de la misión del organismo en Libia.

Desde el estallido de los enfrentamientos en la capital y sus alrededores más de 3.400 libios se han visto desplazados, mientras que muchos otros han quedado atrapados y sin la posibilidad de escapar.

ACNUR ha reiterado además que las condiciones en Libia no son seguras para los refugiados y migrantes rescatados o interceptados por las autoridades y ha reclamado que no sean devueltos al país africano.

MEDIO MILLÓN DE NIÑOS EN RIESGO

Por su parte, el representante especial del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en Libia, Abdel-Rahman Ghandour, ha dicho que el incremento de la violencia ha puesto en riesgo a "cerca de medio millón de niños en Trípoli y a decenas de miles más en las áreas occidentales".

"UNICEF hace un llamamiento a todas las partes en conflicto para que protejan a todos los niños en todo momento y los mantengan fuera de peligro, de acuerdo al Derecho Humanitario", ha dicho en su comunicado.

En el mismo, ha recordado a las partes que "no han de cometer violaciones graves contra los niños, incluidos el reclutamiento y el uso de niños en los combates", y ha recalcado que "permanece sobre el terreno para brindar, junto a sus aliados, el apoyo necesario a los niños y sus familias".

LA OFENSIVA DE HAFTAR

El autoproclamado Ejército Nacional Libio, que encabeza Haftar, lanzó el 3 de abril una ofensiva para limpiar de "terroristas" el oeste de Libia, donde se encuentra Trípoli, e inició su avance hacia la capital.

El Gobierno de unidad lanzó por su parte una operación para repeler los avances de las fuerzas del mariscal de campo hacia la capital. La comunidad internacional ha condenado la ofensiva de Haftar y ha pedido el fin de los combates.

Al menos 47 personas han muerto y otras 181 han resultado heridas en los últimos días en los combates en torno a Trípoli, según ha informado este martes la Organización Mundial de la Salud (OMS) en base los datos ofrecidos por instalaciones sanitarias próximas a la capital.

El portavoz de la OMS, Tarik Jasarevic, ha señalado que el balance, superior al ofrecido hasta ahora por ambos bandos, serían principalmente combatientes, si bien también hay algunos civiles. Además, ha advertido de que la reanudación del conflicto podría provocar que se agoten los suministros médicos.

Este lunes, la delegación de la OMS en Libia había denunciado la muerte de dos médicos en los enfrentamientos. "Es inaceptable que trabajadores sanitarios sean atacados durante un conflicto armado", denunció el director de la OMS para el Mediterráneo Oriental, Ahmed al Mandhari.

"Las partes en dicho conflicto deben respetar el Derecho Internacional Humanitario y garantizar que los trabajadores y las instalaciones de salud son seguros", recordó.

Últimas noticias sobre estos temas

Contenido patrocinado