MADRID, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
Un cooperante sursudanés fue asesinado el pasado fin de semana en un ataque en Bentiu, en el norte de Sudán del Sur, según ha denunciado el coordinador humanitario de la ONU en el país africano, Alain Noudehou, que ha condenado que los trabajadores humanitarios se hayan convertido en objetivos en el conflicto.
Según ha informado la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) en Sudán del Sur en un comunicado, el pasado fin de semana hombres armados dispararon contra un vehículo con el logo de la ONG católica CORDAID en el que viajaban cinco cooperantes, matando a uno de ellos que trabajaba para la ONG local Hope Restoration.
Los hechos se produjeron en la carretera entre Nhialdlu y Bentiu, la capital del estado de Unidad, donde horas después y en un punto cercano fueron robados a punta de pistola ese mismo día miembros de la ONG CARE International.
Al menos 98 trabajadores humanitarios, en su mayoría sursudaneses, han sido asesinados en Sudán del Sur desde que estalló el conflicto en diciembre de 2013 entre el presidente, Salva Kiir, y su antiguo vicepresidente Riek Machar, a los que en los últimos años se han unido otros grupos armados.
"Los cooperantes arriesgan sus vidas cada día para ofrecer ayuda vital a las personas necesitadas en Sudán del Sur. Condeno firmemente el ataque contra trabajadores humanitarios y pido que los responsables de estos actos sean llevados ante la justicia", ha reclamado Noudehou, que ha expresado sus condolencias a los familiares y compañeros del fallecido.
Por otra parte, el pasado 25 de marzo siete sursudaneses que trabajaban para la ONG local SSUHA fueron secuestrados en el estado de Equatoria Central por milicianos del Ejército de Liberación del Pueblo de Sudán- En Oposición (SPLA-IO), el principal grupo rebelde, mientras circulaban en un convoy de tres vehículos entre los condados de Kupera y Lainya con ayuda para miles de necesitados.
En este sentido, el coordinador humanitario ha reclamado su liberación inmediata e incondicional y reclamado a todas las partes en el conflicto a que permitan el acceso seguro y sin restricciones a los millones de sursudaneses necesitados de ayuda.
Según las últimas estimaciones del Fondo de la ONU para la Agricultura (FAO), unos 6,33 millones de sursudaneses se encuentran en situación de inseguridad alimentaria, frente a los 4,8 millones que había a finales de 2017. Además, se espera que con la llegada de la estación de escasez, entre mayo y julio, la cifra alcance el récord de 7,1 millones, a menos que llegue la suficiente ayuda.
Unos 4,3 millones de sursudaneses se han visto obligados a abandonar sus hogares desde que estalló el conflicto, unos 2,4 millones de los cuales han buscado refugio en los países vecinos.
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