MASNAA (LIBANO), 28 (EUROPA PRESS)
Unos 200 palestinos se encuentran aún en el paso de Masnaa entre la frontera de Líbano y Siria, a la espera de autorización por parte de Damasco para cruzar a territorio sirio.
Tras haber huido de algunas de las regiones más peligrosas de Líbano cercanas a Tiro y al valle de Bekaa, las familias palestinas pidieron oficialmente abandonar el territorio libanés pero no se les ha negado el acceso a Siria, por lo que se encuentran en tierra de nadie entre los dos países.
Casi todos se encuentran apostados junto al paso fronterizo de Masnaa con sus documentos de viaje palestino libaneses, especialmente emitidos para los entre 350.000 y 400.000 palestinos que residen en Líbano pero disfrutan de derechos limitados y estatus restringido, recoge la agencia de noticias de la ONU, Irin.
Pese a que la ONU estima que unos 1.000 palestinos han sido por el momento autorizados a entrar en Siria, muchos llevan atrapados en la frontera más de una semana, mientras los sentimientos de frustración y desesperación comienzan a hacerse evidentes.
Los más afortunados, esperan los visados sirios en una habitación abandonada del principal edifico de inmigración en la frontera, donde varias familias han instalado asentamientos provisionales con colchones de espuma y mantas y provisiones de alimentos.
La representante en funciones de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) en Siria, Laurens Jolles, afirmó que se ha realizado una petición urgente al Gobierno sirio, para ase relajen los requerimientos de entrada al país por motivos humanitarios.