JERUSALÉN, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha criticado este sábado las declaraciones vertidas por el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, en las que ha dicho que "la reconciliación son las elecciones" y ha insistido en que no se logrará antes de que la comisión electoral pueda operar en la Franja de Gaza, y ha recalcado que las mismas fomentan la división política.
El portavoz de Hamás, Fawzi Barhoum, ha argumentado que, con su discurso, Abbas pretendía hacer a la formación islamista responsable del fracaso del proceso de unificación, al tiempo que ha recordado que el mandato presidencial de Abbas ya finalizó y que su presidencia es ilegal hasta que se alcance la reconciliación.
Abbas accedió al cargo en 2005 y su mandato expiró oficialmente el 9 de enero de 2009, aunque Al Fatá alega que su estancia en el puesto es legítima ante la ausencia de elecciones presidenciales.
"No se pueden negar las detenciones políticas, pero no se acepta que hay personas que han sido liberados por Israel y detenidos poco después por los servicios de seguridad de Cisjordania", ha manifestado, según ha informado la agencia palestina de noticias, Maan.
Como parte del acuerdo de reconciliación alcanzado en mayo de 2011, los partidos se comprometieron a celebrar elecciones para unir Cisjordania y la Franja de Gaza bajo una única administración.
La Autoridad Palestina anunció el 10 de julio que los comicios se celebrarán en Cisjordania el 20 de octubre, una decisión que fue denunciada por Hamás y descrita como "un paso unilateral" destinado a minar el proceso de reconciliación. Días antes, Hamás había suspendido el proceso de registro de votantes en el enclave.
La separación administrativa y territorial se produjo en 2007 tras la victoria de Hamás en las elecciones legislativas de 2006. La victoria del movimiento islámico en los comicios, valorados como justos por lo observadores electorales internacionales, provocó que la comunidad internacional cortara sus ayudas a las autoridades palestinas.
Esto abocó a Al Fatá y a Hamás a unos enfrentamientos que finalizaron con la separación territorial y administrativa de Cisjordania y la Franja de Gaza. Desde entonces, Al Fatá controla Cisjordania --a pesar de no haberse hecho con la victoria en las elecciones-- y Hamás está al frente de la Franja.
