O.Próximo.-"Hamás no entiende el proceso democrático", según el presidente parlamentario de Al Fatá

BELÉN (CISJORDANIA), 25 (De la enviada especial de EUROPA PRESS, Cristina Bonillo)

El presidente del grupo parlamentario palestino de Al Fatá, Jalil Al Haya, manifestó hoy que la crisis interna que viven los Territorios Palestinos se debe a que el grupo Hamás, que ostenta el Ejecutivo, "no entiende el proceso democrático y político", según declaró en una reunión con la Plataforma de Mujeres Artistas contra la Violencia de Género y una delegación de ONG y periodistas que se encuentran en Cisjordania para presentar una 'hoja de ruta por la paz' con perspectiva de género.

Así, Al Haya recriminó que pese a que se lleva dialogando diez meses con Hamás "no se ha conseguido lograr un acuerdo para formar una Gobierno de unidad nacional", justificando el hecho de que el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, de Al Fatá, haya convocado recientemente elecciones anticipadas en los Territorios Palestinos, para tratar de desbloquear la ayuda de los países occidentales que ha puesto a la región y sus habitantes al borde de una crisis humanitaria.

"Si no se logra un Gobierno de coalición palestinos, vayamos a las elecciones para que sea el pueblo quien decida", apuntó. Hamás se proclamó vencedor en los pasados comicios de enero de este año. Desde entonces, Israel, Estados Unidos y la Unión Europea han eliminado la financiación al Ejecutivo palestino ya que el grupo está considerado como organización terrorista, por su negativa a reconocer al Estado hebreo y a renunciar a la violencia. Esto ha provocado, entre otras cosas, que los funcionarios públicos lleven nueve meses sin recibir sus salarios, el colapso de los servicios y el deterioro de la ya castigada economía palestina.

El líder parlamentario afirmó que Hamás se rige por las relaciones internacionales que tiene con países árabes e islámicos. "Sus decisiones siempre dependen de sus relaciones internacionales, no son propiamente palestinas", acusó, recordando que, en última instancia, las decisiones no surgen "del pueblo palestino". Sin embargo apuntó que Al Fatá no pretende solucionar los problemas "con una guerra civil o a balazos".

En cuanto a la reunión que el pasado 23 de diciembre mantuvieron Abbas y el primer ministro israelí en Jerusalén, la primera entre las partes en 22 meses, Al Haya señaló que Al Fatá tiene esperanza en se cumplan los "pequeños acuerdos" a los que se llegó durante las dos horas de conversación. Estos acuerdos comprenden, según explicó, el desmantelamiento de 59 puestos de control militares de los 500 fijos que Israel tiene en terreno palestino, el establecimiento de un calendario para la retirada de territorios que fueron reocupados al inicio de la Segunda Intifada en 2002, y "la posible liberación de un número de presos palestinos".

El parlamentario constató que "la ocupación israelí es salvaje"y destacó que, a excepción de Irak los Territorios Palestinos son el "único país ocupado del mundo". "Nuestro deseo es una paz justa basada en las resoluciones del Consejo de seguridad de la ONU", afirmó. "La clave, manifestó, está en "encontrar un mecanismo que ponga en práctica la legalidad internacional".

En este sentido, señaló que Al Fatá "aplaude la propuesta francoespañola" para la celebración de una conferencia internacional que reactive el bloqueado proceso de paz, y recordó que es Israel el que "se ha negado a aceptar la conferencia". "Queremos que el mundo intervenga y no que Estados Unidos sea el único mediador", afirmó, recordando el intento de Camp David, que fue un fracaso , porque "Estados Unidos se inclina claramente hacia una parte", aclaró.

"España ha jugado un papel muy activo por la paz", señaló, felicitando al Gobierno español y a la delegación española, entre quines se encontraba la parlamentaria y presidenta del Intergrupo Parlamentario por Palestina, Fátima Burto, así como la diputada Soledad Herrero y la eurodiputada Paca Sauquillo.

Así, insistió en que para que se pueda instaurar la paz en la zona, es fundamental que se cumplan algunas condiciones como "el fin de la ocupación y la construcción de un Estado palestino con las fronteras anteriores a 1967", lo que, recordó, supone un 22 por ciento del territorio de la Palestina histórica.

Adicionalmente "Jerusalén debe ser la futura capital de dicho Estado y estar abierta a todas las religiones", dijo, insistiendo en que Al Fatá "acepta la propuesta de dos Estados", uno israelí y otro palestino. Otro de los asuntos que deben tenerse en cuenta a la hora de implantar la paz debe ser "el retorno de los refugiados palestinos", concluyó.