PARIS 15 Sep. (Del corresponsal de EUROPA PRESS, Javier Gómez Muñoz) -
El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, hizo un llamamiento, hoy en París, a las sociedades civiles de los países del Mediterráneo para que lideren el diálogo entre las diferentes culturas y apoyen las iniciativas de paz en Oriente Próximo.
"Si los ciudadanos no apoyan los acuerdos y no se comprometen, de nada servirá que los políticos firmemos tratados", explicó el ministro, en relación a la situación en la región. "No basta con la paz de los líderes. La diplomacia de los ciudadanos puede ayudar en este momento crítico", comentó el jefe de la diplomacia española, en relación al conflicto israelo-libanés, el mismo día en que las primeras tropas españolas se despliegan en el sur de Líbano dentro de la fuerza internacional de paz.
En su alocución dentro del Taller Cultural Europa-Mediterráneo-Golfo, que celebra su primera edición en París y que tendrá continuidad en 2007, en Sevilla, Moratinos pidió a las sociedades civiles que "hablen alto y fuerte" porque "está en juego el futuro de los ciudadanos".
"La paz es posible, no es una utopía. Pero la sociedad civil debe estar en primera fila para lograrla", añadió el ministro, quien citó los numerosos problemas "tradicionales" --conflicto israelo-palestino, paz, seguridad-- y los "nuevos" --carrera nuclear, energía, terrorismo-- a los que se enfrenta esta región del mundo.
Moratinos criticó los "silencios dramáticos" de los intelectuales árabes "que no condenan los atentados terroristas", así como los de los "intelectuales israelíes" que omiten criticar "las operaciones militares cuando éstas rebasan lo comprensible y no van a ninguna parte".
El jefe de la diplomacia española citó la Alianza de Civilizaciones como la aportación del Gobierno español para colmar la distancia entre el mundo occidental y el mundo árabe. Una iniciativa que, según Moratinos, "ha recibido todo el apoyo diplomático". "Incluso de la OTAN, sí, de la OTAN, qué sorpresa", apostilló.
"La rivalidad cultural es la más peligrosa arma de destrucción masiva", subrayó en su discurso el ministro, quien reconoció que la cumbre del décimo aniversario del Proceso de Barcelona no sirvió como "punto de inflexión" del compromiso europeo con el mundo mediterráneo.
Moratinos, que se expresó en francés, intervino tras la ministra gala de Asuntos Europeos, Catherine Colonna, y antes del secretario general de la Unesco, el japonés Koichiro Matsura.
"No se puede imponer una democracia a un pueblo que nunca la ha elegido", declaró Colonna, según la cual "el Estado y la sociedad civil no deben enfrentarse ni oponerse, sino buscar convergencias". "Francia apoya las reformas en el mundo árabe, pero éstas deben hacerse no bajo amenaza ni con urgencia, sino siguiendo el ritmo de cada país", añadió la ministra.
Colonna lamentó que el Proceso de Barcelona, germen del Taller Cultural Europa-Mediterráneo-Golfo, "no se haya desarrollado lo suficiente en el ámbito cultural" y consideró las inversionesen educación y cultura como "las mejores armas" contra los conflictos culturales.